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Los Jonas viven dentro de ti.

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jueves, 21 de marzo de 2013

Every little thing she does is magic (Cap. 8)




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Da RT à

¿Oportunidades? Siempre… ¿Qué las aproveches? Piensalo.


Moments.



(NICK)


Jamás me había sentido tan avergonzado., o peor aún, como un reverendo idiota.


 
            -¿Nick? – la voz de Katie se escuchó. Ella estaba ahí, en el suelo. No sabía si correr o esconderse.

            -¿Quién eres tú? – un hombre de raza negra me preguntó alzando la ceja.

            -Oh Michael ¿Qué no reconoces a un Jonas cuando lo tienes enfrente? – sonrió. Él chico se quedó boquiabierto.

            -¡Perdón! – rápidamente se disculpé al ver que no pasaba algo fuera de lo normal. – Es que… bueno…

            -¡Pásate Nick! – El hombre me tomó de la muñeca y me introdujo al salón – De hecho, estábamos ensayando para el número de mañana. ¡Me llamo Michael Wallace y soy el mejor amigo de Katie!

Efectivamente, Katie estaba con un hombre, pero no precisamente haciendo lo que yo creí que estaban haciendo.


Había música con torno sensual, si. Pero ambos estaban muy bien vestidos; además, creo que el chico que estaba con ella, no precisamente las chicas eran “su mercado afín”.


            -De hecho, tu no deberías ver el ensayo, pero creo que nos haría bien que una persona ajena a nosotros, nos diga su punto de vista – Michael seguía hablando, mientras yo estaba rojo como un tomate. Tantas imágenes me vinieron a la mente que pensé que lo peor estaba pasando dentro de este salón lleno de espejos. Pero ahí estaba Katie, sentada en una de las sillas bebiendo de su botellón con agua, escuchando lo que Michael me decía. Ella estaba tranquila, pero aun así sorprendida por mi repentina aparición.


(KATIE)


No sabia la razón del por que Nick había aparecido en ese momento en el salón de baile mientras ensayaba con Mickey. Lo que si podía ver, era un rojo muy vivo en sus mejillas y no quería mirarme a los ojos por alguna extraña razón. No quería quedarme con la duda del porque había venido, así que cuando Michael decidió ir al baño creí que era un buen momento para preguntarle.


            -¡Este lugar es genial! – me dijo tomando un botellón de agua que estaba cerca de nosotros.

            -¿Puedo preguntar como sabías que estaba aquí?

            -Todo el mundo habla de ti en el lobby – dijo de forma despreocupada – Y bueno, además, quería saber como seguías después de mucho que bebimos ayer.

Solté la carcajada, pero más que nada por el nervio al recordar como había amanecido el día de hoy. Con su mano sobre la mía.

            -Tuve un pequeño dolor de cabeza, pero no hay nada que una  adecuada alimentación matutina no ayude a recuperar.

Se rio conmigo, para después…

            -¿Y como esta T.J?

            -¡Esta bien! Lo bueno que es un niño fuerte y que procura olvidar rápido esas pesadillas. – era un buen momento para agradecerle aquel gesto que había hecho por mi hermano.

            -¡No debiste quedarte! Tal vez no dormiste bien a como estas acostumbrado al igual que Frankie.

            -¡Espera! ¿De que hablas? No tienes por qué decirme que no debí. ¡T.J. tenia una crisis la cual a pesar de que estabas ahí, le iba a afectar. Y creo que además de tener una súper hermana como tú, necesitaba un “camarada” con el cual confiar ¿No crees?

Eso me sonó demasiado convincente y razonable. Y a la vez tan tierno y considerado de su parte hacia mí hermano.

            -¡Pues muchas gracias! – traté de sonreír, pero algo me impulsó a ponerme de pie y cambiar la canción que teníamos en ese momento en el reproductor de mp3.

Michael salió del baño y se dedicó a bailar conmigo, mientras Nick observaba.


(MICKEY)


El hecho de volver a ver a mi amiga después de estar lejos de ella por unas semanas, era revitalízate, pero jamás me imaginé que estaría muy bien acompañada por un bombón como el menor de The Jonas Brothers. Nick Jonas realmente era hot y más después de que por todo el mundo las fotos de su torso desnudo conjunto a su hermano Joe, habían causado orgasmos visuales alrededor del mundo.


Era un chico realmente agradable, que a pesar de su seriedad decía cosas divertidas y sarcásticas.

Pero llamó mi atención algo realmente notorio en su rostro. Él sentía una  atracción por mi Katie. No podría apostar mi alma al diablo, pero creo que no me equivocaba. Su mirada se movía al ritmo del de ella, como si solo fuera el foco de atención en ese momento. Pero, creo que todos sabemos que él tiene una novia (La cual es bellísima, pero muy vieja para él). Tal vez se vería mal de mi parte, pero quería averiguar la realidad de las cosas…


            -¿Qué dices si ponemos un toque sexy en el baile de mañana? – dije.

            -¿Quieres que haga un striptease o algo así? – bromeó moviendo las caderas de forma sensual y exagerada, mientras nos moríamos de risa.

            -¡Claro que no estúpida! Me refería que si mañana vamos a bailar mientras Johnny canta, deberíamos agregar algo sexy en el baile. – Decía muy convencido - ¡Es algo que los huéspedes van a adorar!

Le pareció una buena idea.

            -¿Qué sugieres cariño?

Me quedé pensando por un segundo, mientras afinaba detalles mentales al pequeño plan.

            -¡Échanos una mano Nick! – me dirigí a nuestro acompañante.

            -¿Qué? – la sonrisa burlona desapareció de su rostro, y sus mejillas se tornaron tales rojos tomates.

            -¿Qué vas a hacer? – preguntó sorprendida al ver su acción.

            -¡Yo solo vengo de mirón! – se defendió.

            -Pero que yo recuerde, tú estuviste en el mundo de Broadway.
-¡Cuando era un niño!

-¡Pues no me importa! ¡Ahora me ayudarás para poder proyectar lo que quiero hacer!

            -¡No sé bailar!

            -¡No me hagas reír!


(NARRADOR)


Michael había formulado un plan muy rápido, pero según él podría darle respuesta a la interrogante que tenia en su mente. Puso a Nick a unos cuantos metros de Katie para poder comenzar.

            -Necesito que ambos cierren los ojos.

            -¿Qué es lo que tramas Wallace? – cuestionó Katie no muy convencida de lo que su amigo les decía.

            -¡Quiero ver que podremos hacer para mañana! Pero necesitaba a un voluntario para poderme proyectar mejor. Ahora, necesito que ambos caminen al ritmo de la música pero cierren los ojos.  

            -¿Hablas en serio? – Nick algo nervioso.

            -Solo quiero ver como seria, así que ¡Ojos cerrados!

            -¡Esta bien! – dijo ella con seguridad nata. - ¡Vamos Nick! Solo es una prueba.

A Nick se sentía estimulado con esa actitud madura y temeraria de ella. Los cerró sin duda alguna. Así que Mickey decidió poner música parecida a que estaban escuchando antes de que Nick llegara. Él al verla con el poder de decisión imitó a Kat para poder hacer lo que Mickey proponía.



 A REPRODUCIRLA COMO MÚSICA DE AMBIENTE

            -¡Concéntrese, dejen que la música los envuelva y déjense llevar! – Mickey decía de forma sutil para poder armar una completa armonía.

Katie comenzó a mover la cadera de forma suave y sexy a la vez, haciendo que el hombre abriera un poco los ojos y se diera cuenta de ese movimiento. Rápidamente los cerró para evitar ser descubierto.

Michael siguió dando órdenes a ambos.

            -Ahora necesito que ambos bajen la cabeza, mirando hacia al suelo y cuando les diga, alzaran las miradas viéndose detenidamente. No dejaran de caminar y hasta que estén frente a frente. Nick, tomarás la cintura de Katie, mientras ella te toma de la nuca y sin dejar de marcar su lugar, caminaran en un solo círculo casi chocando su nariz.


Eran instrucciones claras y precisas, haciendo que los dos se pusieran nerviosos sin ni siquiera haberse tocado. Pero con el solo hecho de imaginar la escena, la piel de ambos estaba hecha de gallina.

            -¿Listos? 5, 6, 7,8…

Los dos comenzaron a caminar con un paso seguro donde escondían torpeza y nerviosismo. Nick no sabia por que estaba haciendo esto, pero le encantaba esta pequeña dinámica que Mickey hacia.

            -Sigan caminando… ¡Eso es! ¡Perfecto! ¿Listos? ¡Alcen la vista! – lo hicieron haciendo que la electricidad fuera instantánea al conectar sus miradas. Katie sintió un cosquilleo en el estomago al verlo tan cerca de ella, y más al momento de que ya no hubo espacio entre ellos. La mano de Nick se fue directamente a la cintura y la de ella, comenzó a vagar desde el cuello hasta la nuca jugando con sus rizos.

            -¡Piernas firmes Katie! – ordenaba Michael – Nick, guíala a caminar en circulo conjunto a ti y no pierdan contacto visual.

Parecía fácil seguir las instrucciones, pero para los dos implicados no era nada sencillo tener que mirarse a los ojos mientras bailaban de forma tan cercana.

Mickey les pidió que fuera más lento los movimientos, casi llegando a ser una especie de cámara lenta.

Ahora ella estaba dándole la espalda,  mientras ambos movían las caderas a la par. La mano de Katie seguía sobre la nuca de Nick; y no dejaban de tener contacto visual. Los dedos de él tocaron algo de la piel desnuda de su cintura que era cálida y suave haciendo que se estremecieran. Ambos se miraban con real devoción que ni siquiera un comando armado podría causar que se dejaran de ver así. Bueno, solo la interrupción del causante de tal escena, mientras la respiración de ambos tocaba sus pieles de forma increíble.


(NICK)


Sus labios están a menos de 10 centímetros de los míos. Su respiración y la mía es una sola mientras toco su cintura y su piel es cálida al contacto con la mía. Era una sensación tan placentera y reconocida que no quería dejar de sentir ni de broma. Juro por Dios que estoy a punto de besarla. Pero tan solo recordar que Delta esta en mi vida el impulso se guarda aunque me muero por hacerlo.

Sus ojos en color café claro, me hacían elevar hasta el cielo y tocarlo. Estaba a punto de hacerlo… pero de repente:

            -¡Perfecto! – Gritó con alegría Mickey - ¡Tenemos el toque!

Ella sin decir nada, dejó el contacto visual y se alejó saliendo de mis brazos. ¡NO!

            -¡Excelente! – dijo con una sonrisa extraña. No parecía muy convencida de que todo estuviera bien – Mickey, será mejor que vayamos a hacer el ultimo ensayo y agregamos tú idea.

            -¡Me parece excelente! – respondió su amigo.

Ella comenzó a tomar sus cosas y le dio un largo trago a su botellón de agua.

            -Nick, mañana te esperamos en la Vulvuzela y… - Mickey la interrumpió.

-¡Tienes estrictamente prohibido faltar! No queremos que te lo pierdas ni tampoco tu familia.

Ella simplemente me sonrió por última vez y salió siendo empujada con su amigo, dejándome a medio salón con una sensación de dolor y a la vez de emoción.

Era obvio que no podría faltar a este evento donde ella seria una de las protagonistas, pero ¿Por qué si sé hago mal en fijarme en ella, no quiero dejar de hacerlo?


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(KATIE)


El ensayo terminó y todos quedamos satisfechos por el enorme esfuerzo y el excelente trabajo. Solo mañana lo presentaríamos como es debido, pero obvio que previamente haríamos otro ensayo.

Johnny obviamente que fue al bungalow a saludar a mi tía, mientras Keith y a banda se unían  para conversar.

Conocí a Johnny Clegg en mi estancia en Sudáfrica. Mickey ya había trabajado con él ya que a él le encantaba saber más de sus antepasados de la tribu zulú. Después de que yo había llegado de Londres, mi mejor amigo me llevó a conocer algo más “personalizado” como una visita guiada. Además, era obvio que ya sabia quien era Mr. Clegg. Un británico criado en Sudáfrica, cantante y aventurero que desafió a las leyes de que “hombres negros y blancos no podían estar juntos haciendo actividades” y mucho menos tocar en una banda juntos.


Hubo un momento que necesité estar sola. Había hecho tantas cosas que habían entretenido mi mente durante toda la tarde, y ahora quería apartarme de la multitud en mi casa para poder digerir lo ocurrido por la tarde.

Entré a mi habitación y me senté en la cama recordando aquellos momentos de danza con Nick. Esa conexión tan fuerte jamás la había sentido con alguno de mis compañeros de danza o en pretendientes a lo largo y ancho de mi vida. Alguna vez, mamá me había dicho que solo eso lo puedes sentir con realmente es tu otra mitad para el baile o con la persona que estarás el resto de tu vida. Pero ¿Cómo yo podría estar con Nick Jonas si él tiene una estable relación según tengo entendido?

Quería sacar de mí esa sensación de paz y sensualidad cuando yo estaba entre sus brazos mientras la música era testigo de todos aquellos movimientos mientras Mickey no daba indicaciones.

¡Mickey! ¡ESE INFELIZ! Me dirigí a abrir la puerta

            -¡MICHAEL WALLACE! – grité y se escuchó por toda la casa.

            -¿Qué pasó? – era Aile.

            -¿Dónde esta Michael? – le pregunté furiosa.

            -Se fue a la playa, pero dijo que regresaba en unos minutos. ¿Por qué? ¿Qué pasa?

Tenia que decírselo a alguien porque si no lo había me volvería loca. Jalé a mi hermana hasta el interior de su habitación que estaba frente a la mía y cerré la puerta.

            -Te voy a contar algo que verdad me esta matando.


Me miró sorprendía, pero no más cuando terminé de contarle todo lo que pasó en aquel salón de baile, inclusive hasta sin palabras se quedó.


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(AILE)


Me quedé sin palabras al escuchar lo sucedido.

            -¿Qué piensas? – preguntó después de más de 30 segundos sin decir ni una sola palabra.

Tragué saliva.

            -No sé que pensar hermanita – le dije – Nick me agrada y mucho…

            -Pero solo podemos tener una relación tanto de amistad y profesional. – dijo con seguridad.

            -¿Acaso te vas a atrever a decirme que no te gusta ni un poquito? – le pregunté.

Se quedó pensando por tres segundos.

            -¡Es un chico muy agradable y educado! Correcto y responsable en el cual se puede confiar fácilmente.

            -¡Puras patrañas! – Alcé la ceja – No solo ves eso en él y lo sabes.

Saqué mi teléfono y busqué la fotografía que había sacado en la madrugada. Cuando la tuvo ante ella, un brillo especial apareció, pero claro pretendió ser escondido.

            -¿Cómo se les ocurre? Si esto llega a manos de los medios.

            -¡Jamás llegará! Solo Joe y yo tenemos la foto.

            -¿QUÉ? – sabia que esto la iba a molestar. Así que preparé mi mejor discurso.

            -No tiene nada de malo la fotografía. De hecho, yo fui quien acomodó sus manos de esa forma. Solo quería darle un toque más tierno a la foto. Parecían realmente una familia.

            -¿ACASO ESTAS LOCA? – Después, respiró… ya sabia que estaba molesta – Nick Jonas tiene una relación con alguien más. ¿Qué parte de eso no puedes entender?

            -¿Qué me estas queriendo decir? ¿Qué si Nick no estuviera con alguien en este momento, te darías la oportunidad? – ese fue un punto realmente fuerte como para que cerrara la boca y me mirara dudosa.

            -Me voy a dormir. ¡Buenas noches! – dio la media vuelta y salió de la habitación sacando chispas.

Esto no era normal. Katie tal vez estaba enamorada de Nick, lo cual seria una buena noticia para Joe. Pero lo que faltaba saber era si Nick estaba enamorado de Katie. ¡Dejaría al vejestorio australiano y me volvería cuñada de mi ídolo! Y estaría más cerca de Joe… ¡Esperen! ¿Por qué pensé eso?


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(NARRADOR)


Katie tuvo que recurrir a las píldoras para dormir, ya que el comentario “inocente” que emitió su hermana acerca de que si Nick Jonas era libre no le permitían dormir por nada del mundo. Se imaginaba escenario donde implicaba su compañía, su calor… pero ella no estaba dispuesta a pelear por un hombre que estaba “feliz” con otra en una relación estable.

Tenía que descansar y por eso recurrió a la droga para poder dormir las 8 horas que exigía su cuerpo, pero aun así su subconsciente le jugaba bromas, soñando con Nick, estar entre sus brazos y caminar con la playa tomados de la mano. ¡Una broma de mal gusto!


En cambio, el joven Jonas durmió plácidamente sin dejar de soñar. Tomando con sus manos la cintura de la joven Torrealba sin dejar de bailar a un delicioso y sensual ritmo. Pero la gran diferencia, es que podía sentir sus labios tocando los suyos sin besarse. Era como una droga mítica el simple hecho de tenerlo en la mente.

Eran las 9:30 de mañana, y Nick despertaba de forma instantánea. Inclusive le arruinó a Joe la broma de despertarlo saltando en su cama, dejándolo de malas por no cumplir su hazaña.


Cuando terminó de almorzar…

            -¿Irás a ver a las chicas? – le preguntó a Joe que yacía en el sofá viendo la T.V.

            -¡Quizás! Pero yo creo que ahora mismo están ocupadas con lo de hoy por la noche. Lo que es el escenario que esta cerca de la playa esta tomando una forma espectacular, y creo que restringieron el paso y solo puede pasar personal autorizado.

En eso tenia razón. Nadie podía pasar a esa área si no hasta por la noche que todos los huéspedes del hotel fueron invitados. O sea, por la noche.


Por alguna inexplicable razón, Nick necesitaba ver a Katie. Era como si estuviera muerto de sed y solo el verla le daría el liquido vital para poder sobrevivir.


            -¿De cuando acá respetas las reglas? – preguntó Nick a su hermano que por poco se le cae el control de las manos al suelo. Esa actitud no era propia de su hermano menor.

Lo volteó a ver con sorpresa, mientras la sonrisa de Nick era maquiavélica. Creo que alguien el día de hoy necesitaba hacer algunas travesuras.


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NEW YORK CITY: the city that never sleeps.


Como siempre, New York es acaparada de gente trabajadora, algunos ladrones buscan hacer de las suyas mientras los transeúntes caminan sin mirar hacia donde van. Pero nos trasladamos al corazón de la música, el baile y las oportunidades para poder alcanzar el estrellato.


The Marquis Thearer


Al parecer en el teatro de la Calle 46 hay mucho movimiento. Esto significa que tal vez…


            -¿Crees que de verdad podamos encontrar a la chica ideal para el papel de Ariel después del estreno en los cines en octubre?  - preguntaba el chico dándole un sorbo a su Starbucks mientras miraba hacia el escenario que estaba siendo preparado para la ultima audición.

¡Claro que sí! – decía la dama que con tabla en mano donde tenia anotaciones – Tú sabes que queríamos a Julianne (Hough) como tu compañera para llevar el musical a Londres en Enero del siguiente año (2012), pero ya dijo que tiene planes para esas fechas.

-Lo sé – suspiró con pesar – Ella y yo nos llevamos muy bien y seria genial.

-¡Claro! Pero ¿Quién que dice que con la siguiente chica no te la llevaras mejor?

-¡Kenny, Rita! – un chico arriba del escenario los llamó – Aquí viene la ultima chica que hará audición.

-¿Otra chica plástica? – dijo él en voz baja.

-¡Pues aunque lo digas de broma! Pero esta es una de las mejores. Es Deborah McPee.

-¿La sobrina de Velma? – agregó con algo de molestia.

-Solo hay que verla Kenny. Sabes perfectamente que es talentosa y tiene el toque.

-¡Solo es una pesada ególatra que cree merecer todo!

-Veamos que tal ser desempeña ¿Si?

-¿Tengo opción?

Ambos tomaron asientos para poder ver la audición. Kenny tomó el currículo de la chica que ya estaba lista para subir al escenario.

Era amplio y lleno de buenos comentarios acerca de sus actuaciones. Desde los 4 años participando en musicales y obras de teatro.

Una chica de largas piernas, tez blanca pero bronceada, cabello rubio y ojos en color café entra a escena.

            -¡Buenas tardes! – saludó con cortesía y blanca sonrisa. – ¡Soy Deborah McPee!

            -¡Hola! – Contestó Rita mientras Kenny solo sonrió al ver el escultural cuerpo de la chica, sabiendo perfectamente que a pesar de tener un excelente curriculum, era una de las chicas más pesadas de todo Broadway World.

            -Muy bien Deborah – Kenny tomó la palabra - ¿Quisieras mostrarnos de lo que eres capaz?

            -¡Seria un completo honor! – la sonrisa se volvió seductora, pero para Kenny no muy llamativa.

La chica comenzó a prepararse en el escenario. Rita tomaba nota, mientras él quería prestarle la atención, pero por algo la chica que estaba al frente, no logra acaparar su mente.


---


            -¡Es que ninguna da el ancho! – Dijo él dentro de la oficina – Saben moverse, pero no hay ese “toque” que estoy buscando en una chica. Saben bailar, pero no saben interpretar un personaje como lo es Ariel.


            -Entonces, ¿Qué haremos? – Rita estaba impaciente – Tenemos que conseguir a la chica de una buena vez.

            -¡Déjame pensar! Quiero caminar. – salió de la oficina en búsqueda de soluciones en la mente.

Necesitaba a esa chica, pero no encontraba una que fuera la adecuada. Todas las que habían pasado, era n mujeres hermosas que quedaría perfecta para el papel, pero no existía esa pasión que él buscaba.


La música se escuchó por el pasillo, precisamente la canción de Footloose, pero algo modificada.

Kenny decidió averiguar de donde provenía y se dio cuenta que en “cuarto de cámara” un hombre que comía sándwich, estaba viendo un video musical con esa canción. Pero era de chicos interpretando la canción.

La puerta estaba abierta, así que no podría ser descubierto si me ponía cerca del marco. Los pasos eran limpios y con mucho entusiasmo. Se fijó que la canción era “en vivo” y la voz era de una chica. Cuando vio que una chica cantaba, todo el mundo según el video enloquecía. Ella traía un saco en tinto con un moño negro, camisa blanca y short negro con tenis en el mismo color del saco, haciendo énfasis al atuendo que tiene Ren McCormack.

Sin preguntar, decidió entrar a dicho lugar, asustando al chico que comía plácidamente.

            -¿Pero qué demonios? – le dio en pause al video para no perderse ningún detalle mientras le pateaba el culo a quien lo venia a asustar, pero al ver quien era abrió mucho los ojos y rápidamente pidió disculpas – ¡Perdón Mr. Wormald! Creí que era alguien de los muchachos de staff que querían hacerme una broma.

            -No te preocupes. Lo que pasa es que llamó mucho mi atención lo que estas viendo. Es una chica cantando Footloose ¿No es así?


(KENNY)


No pude resistirlo. Tenia que ver bien el rostro de la chica que cantaba la canción y bailaba de manera impresionante.

Al momento de preguntarle al chico del sándwich sobre la chica, sonrió de manera extraña, como si le diera orgullo lo que iba a decir.

            -¡No es una chica cualquiera! Es la pequeña Katia Torrealba. O como le decimos sus amigos Katie o K Dancer en este negocio del teatro.

Es ese momento, puso de nuevo en pause el video y pude ver su rostro por completo. Su sonrisa era fresca y adornaba sus lindas facciones. Era una chica salida de un sueño por completo. Pero de repente caí en cuenta en lo que me había dicho.

            -¿Ella es K Dancer? ¿Te refieres que es la hija de Rosse Dancer, la que ayudó en as coreografías de la película original en 1984 donde actuaba Kevin Bacon? – Asintió con la cabeza. Ella era una leyenda en Broadway y una de mis inspiraciones.

            -Y la hija del mejor jugador de los Yankees

            -¡Andrés Torrealba! – completé la frase. Ya había escuchado de ella, una chica egresada de Juilliard que había­­­ estado desde niña participando en muchos musicales. A pesar de tener menos curriculum que la sobrina de Velma, se decía que tenía un nivel profesional impresionante, además de ser una de las mujeres más bellas y tener un carácter esplendido.

            -¿Sabes en donde podría encontrarla? – pregunté con muchísimo interés. Porque sabia que ella podría ser Ariel Moore en la obra en Londres.

            -Ella no ha venido a la ciudad en casi 6 meses.

            -¿Qué?

            -Lo que pasa es que se fue a Europa, después pasó un tiempo en Sudáfrica y ahora mismo esta en Maui cumpliendo un contrato con Four Seassons. Que por cierto, Velma se encuentra con ella.

            -¿De verdad? – eso significaba que podría hablar con ella para que Katie hiciera el casting.

            -Pero le diré algo Mr. Wormald. No creo que Kat le interese hacer una obra en estos momentos.

Eso si me asustó

            -¿Por qué dices eso?

            -No creo que quiera perderse la segunda mitad de temporada de baseball. Su hermano Derek juega en los Yankees y siempre apoya a su hermano para esas fechas. Si toma papeles, pero que no le impliquen salir de New York.

¡DEMONIOS! Esto si era difícil. Aun no la conocía y ya sentía celos de su propia familia. ¡Tenia que hablar con Velma! Tal vez ella me pueda ayudar en algo

            -¡Muchas gracias amigo! ¿Cómo te llamas?
            -Ronald Grey, pero todos me dicen Roy.

            -¡Muchas gracias Roy! Has salvado el día – y salí corriendo de ahí. Era necesario conseguir hablar con la dueña de la compañía. Era de suma importancia que lo hiciera.


Entré con Rita.

            -¡Tenemos que irnos! – ordené.

            -Pero aun no hemos dicho quien quedará para el papel…

            -Lo diremos después ¡Vámonos!


Cuando estábamos en el auto…

            -¡Necesito localizar a Velma McPee lo más rápido que se pueda!

            -Tengo su numero y su correo, pero ¿Para que?

            -¡Localízala ahora! Otra chica tiene que hacer audición para el papel.

            -Pero ella esta en Hawaii. ¿Cómo esperas que regrese pronto a New York?

            -No creo que sea necesario que regrese.

Rita me miró confundida, pero no me importaba. Tenia que hablar con Velma ¡YA!


---

            -¿CÓMO QUE YA SE FUE? – un grito enfurecido se escuchó por todo el teatro que provenía de los camerinos. – Tenia que decir que yo me quedaría con el papel de Ariel antes de irse.

            -¡Cálmate Deborah! – le decía Jack Snow, su agente - ¡Tal vez se le presentó un inconveniente y pronto tendremos respuesta de su parte!

No dejaba de maldecir la chica que detrás de aquella sonrisa angelical tenia una ambición sin fronteras.

            -Ahora que hay un buen papel en el cual la estúpida de Katia no estará al tanto, es mi oportunidad de por fin tener un protagónico que rebase fronteras y salga de New York.

            -Siempre has tenido excelentes papeles con los mejores directores y con electos de primera. ¿De que te quejas?

            -¿QUÉ NO ENTIENDES? – Gritó enfurecida – He tenido buenos papeles, claro. Pero no excelentes como para que tía Velma me aplauda. Siempre los mejores papeles son para esa huérfana que solo se ha dedicado a arruinarme la vida. Y ahora que Kenny esta buscando a Ariel Moore, no dejaré que nadie me quite ese papel.


¡Damas y caballeros, les presento a la bella, ególatra, envidiosa y prepotente, Deborah McPee!


(VELMA)


Recibí una llamada desde New York, pidiéndome una cita para poder tener una video-llamada lo más pronto posible con el chico Wormald. No sabía para que me quisiera, pero su agente me decía que era de vida o muerte. Cuando llegué a mi suite, me conecté al Skype desde mi computadora, y rápidamente recibí su petición para la videoconferencia.


            -¡Buenas tardes Mrs. McPee! – dijo en tono cortes.

            -¡Hola Kenny! ¿Cómo estas? Supongo que me buscas para decirme que por fin encontraste a tu partner para la obra en mi compañía. 
            -De hecho, por eso me urgía hablar contigo. Todas las chicas que tienes aquí en New York son talentosas, pero…

            -¿No me digas que ni siquiera mi sobrina te agrado para ser Ariel?

            -Deborah es muy bella, y físicamente quedaría hermosa para hacer el papel, pero le hace falta algo. Tiene talento, pero me parece tan… - él buscaba la palabra, pero no quería herir a Velma.

            -¡Sé a lo que te refieres! – dije sabiendo a lo que se refería.

            -Vi un video de una de las chicas de tu compañía. La hija de una de las coreógrafas principales del Footloose en 1984.

            -¿Hablas de Katie Torrealba? Porque es la única chica que tengo que haya sido hija de una de las coreógrafas que colaboró en esa ocasión.

            -Así es. Y estoy interesado de que ella haga una audición para ver si ella podría ser la próxima Ariel Moore.

            -Dudo que quiera Kenny. Ella lo que quiere es descansar durante estos meses. Además, ella da clases de danza en su estudio en Greenwich y va a los partidos de los Yankees.

            -¡Algo me dijeron sobre eso! Pero no estaría mal intentar que ella participara. Si quieres, yo puedo hablar con ella.

En ese momento, por la mente de Mrs. McPee pasó una idea.

            -¡No! no te preocupes, veré que puedo hacer. De hecho, te pediré que estemos en constate contacto ¿Qué dices?

            -¡Claro! Como usted diga Velma. Pero ¿Puedo preguntar que hará?

            -Un ligero cambio de planes…


Claro que habría un ligero cambio de planes. Sabia que si le decía a Kat acerca del papel lo rechazaría. Así que si, ella hará audición, pero sin saber que es lo que hace.


Hasta aquí mis amig@s. nuevos personajes llegan entran a la historia.

De hecho, ellos darán mucho de que hablar y tal vez, ellos cambien el rumbo de los implicados.

Un nuevo musical en puerta, eso conlleva a muchas cosas. Incluidas envidias.

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