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Estas en una habitación, hay distintas puertas. Tu puedes escoger cual abrir, pero recuerda, la que elijas, tendrás que asumir las consecuencias.
Opción
(NARRADOR)
Todo el mundo en aquella sala de espera contuvo la respiración. Desde Nana Paz que dejo a un lado su café, hasta Mike que decidió mirar con desconcierto a los recién llegados.
Instantáneamente se pusieron de pie al verlos, pero los que estaban “protegiendo” a las chicas, era Joe y Nick que eran los afectados directamente.
Alex y July se quedaron en shock al ver a aquellos hombres que les habían jurado amor.
Una decía en su mente. “¿Qué demonios hace aquí? Si yo claramente terminé con él”Otra decía: “Se morirá de coraje cuando le diga que estoy con alguien que de verdad me ama y que no anda de “zorro” con la secretaria.
Pero Joe y Nick, bueno… ¿Creen que haya golpes a medio hospital? Creo que tendrás que seguir leyendo.
(JOE)
Al ver que había llegado la amenaza en contra de las chicas, rápidamente tanto Nick y yo nos pusimos en defensa para evitar peligro para nuestras mujeres.
Obvio que todos nuestros camaradas se nos unieron al percatarse de la presencia de los Ortiz.
-¿Qué demonios quieren aquí? - dije en voz baja para evitar un ruido mayor, por que estarán de acuerdo que estábamos dentro de un hospital y no podía alzar la voz como el momento lo requería.
-Venimos por que nos enteramos del incidente de Robert. - Ed fue el primero en hablar, pero eso sí, sin dejar de ver a Alex.
-No necesitamos la presencia de los asociados de la empresa, nosotros les notificaremos de la salud de nuestro padre – contesto, y se notaba la molestia en sus palabras, mientras July no dejaba de mirar con cara de repudio en contra de Iker que al parecer había llorado bastante.
-¡Nuestro lugar está aquí! A lado de ustedes. - dijo este, haciendo que yo estallara.
-¿TÚ LUGAR? ¡LARGATE IKER! ¡O NO RESPONDO! - solo sentí en montón de manos deteniéndome antes de que rompiera la cara al maldito español hijo de...
-¿Iker? -la voz del Dr. Newton se escuchó. -¡Qué bueno que llegas! Robert acaba de despertar y quiere verte junto a Juliet y Alex.
Las dos amigas se miraron mutuamente, mientras Iker parecía no haberle sorprendido las palabras del Dr. Si claro, Robert Luca sabría que Iker está aquí acompañando a su hija en este mal momento. Y claro está que no sabía que July había roto su compromiso.
-¿Cómo le diré a mi padre? - escuché la voz de mi mejor amiga a mi lado. Noté que sus ojos estaban siendo rasgados por las lágrimas, y yo todo estúpido, me estaba doblegando ante esos bellos ojos que amenazaban con estallar.
-¡Tienes que decirle la verdad mi July! – y yo era lo que más quería. Que le dijera a su padre que no se casaría con ese mal nacido.
Le di un beso en la mejilla para desearle suerte, y ella me dedicó media sonrisa. Era la que mas odiaba, esa era su sonrisa de inseguridad, la que hacia siempre cada vez que no sabía qué hacer.
Se dirigieron a la puerta para poder entrar, pero no sin antes:
-¡Mas te vale que te comportes como un caballero! - le dije a Iker en cuanto las primeras en ingresar fueron mis dos amigas, mientras a este lo tomé por el hombro. - porque bien sabes lo que te pasará si das un paso en falso.
-¡Créeme Joe, ya la estoy pagando y no sabes cuánto me duele!
-Si hubieras pensados las consecuencias...
-¡No me reproches Joseph! ¿Acaso jamás te has equivocado? - golpe bajo – tengo que soportar el estar sin ella ¿Tienes una idea de cuánto me duele? No lo creo, por que jamás te has enamorado.
Se alejó de mí a paso rápido para alcanzar a las chicas, y a mí, me dejo sin respiración. No sabía si enojarme o simplemente callar.
Me había dado una gran estocada por la espalda. "No te has enamorado", esas palabras estaban rondando en mi mente. Iker tenía razón, había cometido un error, ¿Cuántas veces yo no me equivocado y cada una de ellas la ha sabido y siempre me ha perdonado y aconsejado?
Son tantos que he perdido la cuenta, y uno de ellos había sido ilusionarme de que entre Juliet y yo podía pasar algo.
Tal vez, Iker y ella podrían… ¿POR QUÉ DEMONIOS ESTOY DICIENDO TODO ESTO?
(NARRADOR)
Un pasillo largo estaba ante las mejores amigas que iban tomadas de las manos siguiendo al Dr. Newton, mientras el español caminaba a pocos metros detrás de ellas.
-¿Cómo se lo diré? - decía temblando.-No lo sé. Pero ya ves que dijo lo que dijo Carl. No tenemos que darle preocupaciones. Y cuando se entere que no te casaras con Iker, tal vez lo tome a mal.
-¡Gracias! Necesitaba apoyo de esa clase – respondió con sarcasmo.
-Amiga, sabes a lo que me refiero. Él quiere mucho a Iker, lo trata como si ya fuera de la familia. No le gustara mucho la idea de que hayas terminado con él.
-¿Crees que hice mal? – la miró con cierto recelo.
-No lo sé. Es de sabios equivocarse… - pero no pudo completar la frase.
Cuando la joven Luca quería pensar cómo iban a ser sus palabras, Newton se detuvo ante una puerta y la abrió. Las dos jóvenes vieron la cama con sabanas blancas rodeada de tubos de oxigeno, suero, etc. haciendo que ambas soltaran un profundo respiro, conteniendo las ganas de gritar.
-Mis niñas - el hilo de voz del patriarca Luca se escuchó. Una débil pero marcada sonrisa se dibujo en él, haciendo que sus pequeñas corrieran a abrazarlo, con su debido cuidado para no lastimarlo.
-¡Papi! - dieron en diferentes tiempos.
-No creí volver a ver a mis bellas hijas. No se imaginan que miedo tuve al solo pensar que las dejaría. – les acariciaba el rostro varias veces. Era obvio, extrañaba ver los rostros de sus pequeñas que las vieron crecer.
-¡No digas tonterías Papá Bob! Tú eres como los gatos, así que aun te faltan muchísimos años que vivir.
Iker solo veía desde la puerta de la habitación la enternecedora escena. Se sentía la peor escoria del mundo. De tan solo pensar que por su culpa, el padre de la chica que amaba estuviera postrado en una cama. Y peor aún, el no tener el valor de decirle la verdad, por miedo de perderla aun mas.
-¡Mi muchacho! Sabía que estarías aquí - Robert lo miró y lo animo a acercarse.
Ambas mujeres se quedaron se alejaron un poco para darle espacio a Iker para que pudiera acercarse.
-Don Robert. ¡Qué alegría estar hablando con usted!
-Lo mismo digo. – lo abrazó con tal paternalismo que a July se le hiso aun más complicado pensar lo que tenía que decirle a su padre.
Después de unos minutos de charla…
-Juliet, sé de la tontería que Iker hiso. Adelantó la boda, algo que definitivamente me sorprendió, y supongo que te molesto.
-¿Cómo lo sabe? – exclamó Iker.
-Iker ¡Soy su padre! Sé perfectamente de cómo lo renegó y dijo un montón de tonterías. Y podría jurar que ella terminó contigo – Ambos implicados se miraron. – pero lo entiendo. Iker eres solo un hombre enamorado que quiere gritar a medio mundo que te casaste con el amor de tu vida. Claro, esa no es justificación. Pero creo que esa fue la razón.
(IKER)
Tuve que venir a Chicago porque no quería perder a July tan rápido, y mucho menos después de lo que Edgar me dijo:
FLASHBACK
24 hrs antes.
Bebía algo de ron en mi departamento, decidido a embriagarme por lo que había pasado, cuando de repente…
-IKER, IKER… MALDIA SEA… ABRÉ LA MALDITA PUERTA.
Como era de esperarse, la abrí, era mi hermano menor que venía más pálido que un fantasma.
-¿QUÉ GILIPOLLA TE PASA? – no soltaba el vaso.
-NO ME CREERAS DE LO QUE ACABO DE ENTERARME. – entró tempestivamente directamente al bar, tomo la botella de ron y directamente, le dio un trago.
-TOMA UN VASO ¡PUERCO!
-Créeme, que después de lo que te voy a decir, también querrás hacer lo mismo.
-¡HABLA! Sabes que me caga cuando te pones así, a la expectativa.
Se sentó en el sillón, mientras yo me quedé de pie esperando lo que me tenía que decir.
-Mi padre estaba hablando por teléfono… no se con quien, pero le dijo que si tu no hacías nada por casarte con July, le quitaría la compañía a los Luca, por la mala.
-¿Qué quieres decir? – le pregunté aun mas preocupado.
-Que si no te casas, matará a Don Robert y a Juliet.
Mi corazón se detuvo por más de medio segundo. Me sentí morir cuando mi hermano me dijo semejante atrocidad. Mi padre estaba loco. ¿CÓMO PRETENDIA MATAR A LA MUJER QUE TANTO AMO?
FIN DEL FLASHBACK
Regreso a la realidad.
¡DEMONIOS! ¿Cómo era posible que Don Robert fuera el hombre que mi padre tanto odia? ¿Quién diría que él fuera el joven altanero de la Universidad que le había robado al “amor de su vida”? era obvio que no quedaba nada de aquel joven, y que se había convertido en el magnate de la publicidad de todo Illinois, y el mejor padre del mundo.
Robert Luca era el hombre más bueno que jamás conocí. Y lo digo abiertamente, mi padre no le llega ni a los talones. Ahora entendía por qué Rose Mary escogió estar con él, también el por qué July tenía el carácter fuerte, pero a la vez compasivo, porque Alex tanto lo admiraba, porque todo Illinois lo respetaba.
DEFINITIVAMENTE NO MEREZCO ESTAR AQUÍ ANTE ÉL.
Yo era el títere de mi padre, pero si no cumplía su mandato, me quedaría sin nada. No tendría nada para ofrecerle a ella. NO, NO PUEDO PERMITIR QUE ESO PASE. ¡July es lo que más quiero en la vida! Y soy capaz de hacer lo que sea por estar con ella y con tal de que no muera, ni su padre... Por mi, que mi padre se quede con la compañía de Robert, pero a mi July que ni me la toque. Cuando tenga el suficiente poder para pelear con mi padre, lo haré, y le regresaré todo lo que le pertenece.
Me acerco a él y recibo un afectuoso abrazo de su parte, como si fuera el hijo prodigo.
-Juliet, piénsalo bien mi pequeña. ¿Acaso Iker no es lo que siempre soñaste? Iker ¿acaso ella no es la mujer para ti? Muchachos, yo se que se aman, y no por tonterías van a estar peleados. – DIOS, ROBERT DE VERDAD NO SABIA LO QUE ESTABA HACIENDO. Le estaba confiando su tesoro más valioso a un idiota como yo. – lo que más quiero es ver a mi hija casada, con alguien que pueda estar con ella, que la cuide y la proteja, que me den nietos. Es lo que más anhelo con el corazón.
EL IDIOTA ENAMORADO MÁS PELIGROSO PARA ELLA.
(JULIET)
Mi padre me hacía sentir mal. Tenía razón, Iker se había equivocado, un grave error. Y ahora me decía que él quería ver nietos. DIOS, ¿QUÉ HAGO? No quiero contradecirlo, pero tenía que hacerlo…
De repente, noto que Iker me mira, de una manera que jamás me había mirado. Me toma de la mano y me jala hacia afuera de la habitación.
-¿Te fijas? – Me dijo sin soltarme de la mano – tu padre sabe que estamos hechos el uno para el otro.
-¿Y qué quieres que te diga? “Si Iker, olvidemos que adelantaste la boda sin ni siquiera pedirme opinión.
-Lo hice porque de verdad, me urge estar contigo. Eres la mujer que siempre soñé estar. Tiene razón tu padre… lo adelante porque quiero gritarle al mundo entero que Juliet Luca es mi esposa, y la que será madre de mis hijos. Porque lo único que quiero es… estar contigo mi bella Julieta.
No sabía qué hacer, me miraba y sus ojos no mostraban ni una pizca de mentira. Me perdía en sus bellos ojos canela, y cuando estuve a punto de abrir la boca, por alguna razón, el rostro de alguien es especifico apareció en mi mente. El del hombre que estuvo a mi lado desde que todo esto comenzó, mi mejor amigo, Joe Jonas y honestamente, no sé porque lo vi en mi mente.
(JOE)
No sabía que pasaba en el interior del cuarto, pero si les puedo decir que aquí afuera, la cosa estaba que ardía.
Nick estaba más que furioso, porque Edgar estaba ahí, y para acabarla…
-Se supone que tu deberías estar con la secretaria de tu padre – Nick decía sin dudarlo.
-Tú deberías estar en otro lado que no es aquí – le respondió Ed.
-Este es mi lugar.
-También el mío.
-¿Quién te dio ese derecho? - reprochó el español.
Procuré que Nick no abriera la boca, pero obvio, este no se dejo.
-Ella, por que 1. Las conozco mucho más que tu. 2. Es mi jefe, mi amigo, y como mi segundo padre. Y 3. ES PAPÁ DE MI NOVIA.
Todo el mundo se quedó con la cara de ¿QUÉ? cuando Nick dijo eso. Pero el que definitivamente el mas se quedó en shock era Edgar que en menos de dos segundos, demostró su ira.
-¿CÓMO QUE ELLA ES TU NOVIA? ERES HOMBRE MUERTO – todo el mundo se puso de pie para evitar la pelea que todos estaban esperando. Alguno de estos dos comenzaría con la guerra, y el que perdió el juicio fue Edgar.
Groserías, insultos, patadas al aire fueron hechas por parte de estos, hasta que de repente, Iker salió de manera tempestiva de donde se supone que se encontraba Robert. Al ver que su hermano estaba causando problemas, lo agarró el mismo.
-Tenemos que irnos Ed. No empieces con tus peleas infantiles.
-¡ESE INFELIZ DICE SER NOVIO DE MI ALEX! – parecía un perro furioso, hasta los ojos se tornaron rojos.
-¡VAMONOS EDGAR! – ordenó. Y de muy mala gana, este aceptó. Cuando iban directamente al elevador, pude nota que Iker iba más tranquilo de lo que había entrado a ver al Sr. Luca. Parecía que le habían dicho algo que lo había tranquilizado.
A él lo vi tranquilo, yo me puse nervioso, pero no quise preguntar, porque en este momento, lo más importante era la salud de Don Robert. Era lo que lo primordial lo que tenía que importarnos. Pero por alguna razón me sentía inquieto. Algo que definitivamente no quería pasar por alto.
(ALEX)
Pasaron los días y Papá Bob ya estaba en Casa Luca, y si, estaba en silla de ruedas, pero bueno. Lo que definitivamente no quería aceptar era que tendría que estar en casa en reposo absoluto.
-Prefiero darme un balazo – era lo que nos decía, así que por si las dudas, sacamos la pistola que tenía en su habitación (protección personal) y la llevamos al despacho.
Juliet y yo nos haríamos a cargo de la compañía, y no sería la primera vez.
Pero lo que si sería la primera vez es que Juliet no sabía qué hacer en su vida personal.
-¿Qué no sabes qué hacer?
-No Alex. Iker… bueno, simplemente quiere seguir en pie con nuestra relación. Me ha mandado mensajes, flores, de todo con tal de que lo perdone.
Y era cierto. Todos los días amanecíamos infestados de arreglos florales y todos venían con una nota que decía: “Te Amo” “No quiero perderte por una tontería” “Quiero estar contigo”.
Me quedaba claro que Iker quería de verdad recuperarla, era obvio.
-¿Crees que sea bueno darle una oportunidad? – era la pregunta de todos los días.
-No lo sé amiga, pero debo de admitir que se nota que Iker te ama. Tal vez…
-¡Pero Joe se enojara! - ¿QUÉ? esto si era nuevo.
-Haber. ¿De cuándo acá te importa lo que diga Joe en cuestión sentimental? – Guardó silencio.-
-Ya te conté que se enojo cuando le dije que a lo mejor había exagerado el haber roto con Iker de esa manera.
-Si, me dijiste que se puso como loco.
-Pero Iker me ama, puedo verlo en cada arreglo que me manda, los mensajes, los poemas…
-Entonces ¡Permite que la boda sigue en pie! ¿Acaso Joe es tu padre? Tú sabrás, es tu vida. Además, nuestro padre ya te dijo que Iker había cometido un error y te dijo las razones del por qué había adelantado la boda.
Mi amiga parecía dudar.
-¿O acaso será que estas enamorada de Joe? – me miró con violencia.
-Ya te dije que no. Joe es mi amigo y nada más.
-Entonces ¿Qué te impide casarte con Iker? ¿Joe se enoja? Por favor, tiene que apoyarte en la decisión que tomes. Si no quiere, es su problema.
(JULIET)
DEMONIOS. Alex tenía razón. Joe tendría que apoyarme en la decisión que tome. Pero ¿Por qué me importaba que Joe no estuviera para mí? ¿Acaso Alex tiene razón? NO, no puede ser. Joe es todo lo contrario que quiero para pasar el resto de mi vida. Lo quería mucho, pero estoy consciente de que es el hombre menos comprometido del mundo. En cambio Iker, a pesar de su error, sentía que me amaba.
Nadie es perfecto, así que todo el mundo puede cometer un error. Además, si me caso con Iker en dos semanas, mi padre sería feliz, nuestras compañías se unirían, y yo sería feliz a lado de un hombre maravilloso…
Pero ¿Y Joe?...
MALDITA SEA. ¿POR QUÉ JOE NO SALE DE MI MENTE?
(JOE)
Oficina “Gourmet Life”
Revisa los últimos pendientes del día de hoy, y claro pensaba en las cosas que habían pasado los últimos días.
He logrado que Juliet ya no quiera hablar del tema de Iker, y de la boda, eso es bueno. Al parecer esto así será. Ella no se casa, yo sigo aquí, y en menos de lo que canta un gallo, ella y yo seremos felices.
Lo tengo todo planeado. Ella tendía una vida excepcional conmigo, tal vez sin casarnos, pero eso vendría después. Quería hacer las cosas bien, de darle su tiempo, espacio. Tenía que superar esta racha con Iker, pero claro, yo estaré ahí cuando haya pasado esto.
De repente…
-Joseph Jonas, tengo que hablar contigo seriamente. – la voz de Iker interrumpió mis pensamientos. Me volví hacia la puerta y efectivamente era él.
-¿Qué es lo que te trae por acá Iker? – pregunté con algo de ironía.
-Es en serio. No quiero tener problemas contigo. – suplicó.
-Demasiado tarde Ortiz. Desde el día que hiciste menos a mi mejor amiga, volándote su opinión, te ganaste problemas conmigo.
Entró si se puso frente a mí.
-No es necesario que me recuerdes eso. Gracias a eso, la he perdido.
-¿Y no te lo mereces?
-Creí que podrías ayudarme. Tú influyes mucho en sus decisiones.
-Ni creas que haré algo para que ella te perdone. – le dije de manera tajante, y era la verdad, era lo que menos me convenía.
-Ella me ama Joe. No puedes luchar en contra de eso.
-¿Te tan seguro estas que te ama? – me estaba muriendo de risa cuando me decía estas palabras.
-Por qué soy lo que ella quiere. Ella lo que quiere es alguien en quien confiar, con quien formar una familia, unir fuerzas para poder luchar ante la competencia. Yo tengo todo eso, porque yo también quiero lo mismo. Compartimos los mismos intereses.
-Entonces, si comparten los mismos intereses ¿Qué quieres de mí? – le dije molesto.
-Que veas que soy su mejor opción Joe y que me ayudes.
-No eres la única opción que tiene. – dije en tono desafiante.
-Entonces ¿no me ayudaras?
-Sabes que la respuesta es más que obvia. – y con molestia se fue directamente a la puerta, pero antes de salir dijo algo que de verdad me llegó directamente a lo más profundo de mi.
-¿Podrías ser algo menos egoísta y pensar en su felicidad? No todo el tiempo tiene que estar para ti Joe. Y si de verdad quieres que sea feliz, sabes que soy la mejor opción que tiene. ¿Acaso quieres que ella se quede con un tipo como tú, que en lo único que piensa en es sexo sin compromiso? No lo creo, eres su mejor amigo, y por lo tanto, quieres lo mejor para ella. Piensa en ello.
Salió de mi oficina, mientras yo me tiré a mi asiento pensando en sus palabras.
TENIA RAZÓN EL MALDITO ESPAÑOL.
Ella no merece una escoria como yo, alguien que ha tenido más sexo que nadie en el mundo, alguien que no sabe que es "hacer el amor" a una mujer. Siempre satisfaciendo mis necesidades de manera animal, sin pensar.
¿QUÉ HAGO?
(NICK)
Tarareaba una canción mientras arreglaba mis pendientes. Ya faltaba poco para terminar la jornada laboral. Cuando de repente, la ventana del chat se abre.
Alex dice: Y dígame Sr. Jonas ¿Qué quiere hacer el día de hoy después de ir a visitar al jefe?
Vi que en la oficina frente a la mía estaba Alex detrás de su escritorio, escribiendo en el Mac bastante entretenida y con una sonrisilla bastante peculiar.
Nick dice: No lo sé. Creo que la decisión la tiene usted señorita Franco.
Noté que cuando leyó eso en su servidor, sonrió aun más. Ella se volvió a mí, y escribió con el teclado sin dejar de verme
Alex dice: Te amo.
Nick dice: No creo que más que yo. – le respondí al ver su mensaje.
Alex dice: Espera, uno de los inversionistas quiere vernos a Juliet y a mí. ¿Te veo luego ok? Te amo.Ella salió prácticamente de su oficina corriendo, pero sin antes lanzarme un beso al aire. Me encantaba saber que por fin ambos estábamos juntos. A pesar de todo y de todos. Estaba en la ventana mirando hacia el estacionamiento son mi sonrisa más estúpida y enamorada.
Cuando de repente, noté que un coche iba entrado al estacionamiento, y me pareció conocido. Casi me voy de espaldas al ver quién era el que bajaba de aquel vehículo.
(ALEX)
Iba bajando por el ascensor con lentitud, ya que estaba haciendo tiempo porque July aun no bajaba, ya que atendía una llamada desde Inglaterra.
Mi sonrisa era obvia, ya que imaginaba que clase de noche pasaría a lado de mi novio.
No piensen mal… no todo en la vida es sexo. Tal vez una peli, tal vez pizza. Tal vez pizza y peli… y algo de sexo xD ok no pues.
Pero mi pensamiento fue ahogado por un grito que expresé al momento que vi quien estaba recargado en mi auto. -¿QUÉ DEMONIOS QUIERES? – fue lo primero que dije cuando vi a Ed esperándome.
-No puedes estar con ese tipo – me dijo en forma posesiva. – ESE TAL NICHOLAS NO ES PARA TI.
-Demasiado tarde Edgar. Soy su novia y eso no lo puedes cambiar. – le dije tratando de entrar a mi coche, pero me fue en vano ya que no me dejaba.
-Tú eres MI CHICA. Eso te tiene que quedar bien claro.
Se me acercó peligrosamente y me pegó a la pared, besándome en los labios de manera violenta, sus manos comenzaron a vagar de manera asquerosa por mi cintura. No me podía mover ni nada, quería gritar, pero no me dejaba.
Hasta que vi que algo lo aventó y cayó al suelo de manera estrepitosa.
Hasta aquí mis damas… pero no se despeguen… porque saben que esta historia sigue.
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Un beso a todas.
Gracias tripulación… TODAS SOMOS #ArenitaCrew
