Check Yes Juliet (Cap 29)

(NOTA: En caso de no poder publicar comentario, déjalo en el Grupo de Facebook http://www.facebook.com/groups/266839543342349/ o manda un Reply a mi Twitter @PibeJBArenas13)

No se acaba el amor solo porque no estas. No se puede borrar así por así nuestra historia; seria matar la memoria y quemar nuestras glorias. 

Ricardo Arjona

¿Por qué es tan cruel el amor?

#Imagina

(JOE)

Cuando llegué a Casa Luca, le tuve que pedir al portero que no diera que había llegado, que era para darle una sorpresa a July. Y como claro esta, me conoce y me la llevo bien con él, me dio acceso.

Y como era obvio, me metería a la casa como cuando estábamos en la universidad y quería platicar con ella mientras su padre no se daba cuenta que estábamos charlando en su habitación. Entré por la puerta que daba al jardín, pero para mi desgracia, habían quitado la estructura que parecía escalera que daba a la habitación de July. Y claro esta, que la puerta de la cocina estaba cerrada. Estaba buscando la manera de entrar, pero nada. Hasta que me percaté que cerca de la piscina, había alguien. Era mi salvación y mi llave segura. Me acerqué y la tomé del hombro, pero parecía que se había asustado y por poco grita. Rápidamente, le tapé la boca.

       -¡Por favor Nana! ¡No grite! – le dije cuando me miró a los ojos. Le quité la mano, permitiéndole hablar.

       -¡Joseph! ¡Casi me matas de un susto! – Me dio manotazos en los hombros molesta, pero podía notar que estaba gustosa de verme - ¿Qué haces aquí? Que no se supone que July y tú…

       -¡Sé por que lo hiso Nana! Pero no tengo tiempo para explicarle, necesito que me ayude entrar a la casa, tengo que hablar con ella antes de que vaya a cometer un error.

       -¿Sabes que hay vida den juego? 

       -Lo sé perfectamente. Pero si ella cree que esto lo afrontará sola, esta muy equivocada. Tengo que estar con ella, por que es mi vida.

Nana me miró detenidamente a los ojos, para después llevar su mano a mi mejilla y acariciarla.

       -Me recuerdas a alguien Joe, a un hombre que cambió gracias al amor que tenia hacia una mujer. – no supe que decir, solo escuché el tintineo, para después ponerme ante mis ojos lo que me ayudaría a entrar a la casa.

-Supongo que a una vieja se le pueden perder las llaves y que alguien las encuentre en el jardín…

Las tomé en mis manos, sabia cual era la que me abriría la puerta de la cocina.

       -¡Gracias! – le di un beso en la mejilla y corrí hasta dicha puerta.

Con extremo cuidado la abro. No hubo ningún rechinido ni nada por el estilo. La deje abierta para que Nana pudiera entrar cuando ella lo quisiera hacer.

Conocía la casa con la palma de mi mano y sabia perfectamente que la mejor manera de poder llegar al cuarto de Juliet era gracias a la escalera de servicio.

Cuando llego a la planta alta, veo que la luz del pasillo esta prendida, eso significaba que alguien estaba ahí rondando. Espere unos minutos y vi al Sr. Luca que iba directo a su habitación que estaba al final del pasillo. Pero hiso una pequeña escala. Se detuvo frente a la puerta del cuarto de July.

       -¡DEMONIOS! – pensé. Si entraba, seria mi fin y no podría ver a Juliet ni hablar con ella.

Parecía indeciso, alzó la mano, estaba a punto de tocar, yo estaba a punto de tener un ataque al corazón, pero cuando sus nudillos estaban a punto de tocar la puerta… se detuvo, lo pensó un poco, bajó su mano hasta su costado,  negó con la cabeza y siguió su camino hasta su habitación, cerrando la puerta con seguro.

Suspiré de alivio, así que era mi oportunidad de caminar por el pasillo hacia su habitación. Ahora que estaba ante su puerta, no sabia que hacer. Me entró el miedo a que me mandara al diablo por estar aquí, pero ella me debía una explicación y yo tenia que ofrecerle mi ayuda. No podía dejar que ella simplemente se sacrificara y mucho menos nuestro amor. Porque sabia perfectamente que ella me amaba al igual que yo. Que toqué la puerta, pretendiendo esconderme, pero no tuve tiempo de correr, porque ella rápidamente abrió la puerta. Y mi primera reacción, fue abalanzármele y besarla como loco, dejando la puerta abierta. Ella cerró los ojos y estaba a punto de gritar, pude sentir su rechazo al beso, yo ya tenía mi mano sobre su boca para evitar que saliera algún sonido.

       -¡No grites, te lo imploro! – abrió los ojos. Nos miramos fijamente, mientras, confiando en ella, le quité la mano, para que ella simplemente dijera…

       -¡Joe! – se separó de mi rápidamente y corrió hacia la puerta, miró hacia afuera y la cerró sin pensarlo y asegurarla.

       -¿Qué haces aquí? – me dijo quedándose plantada frente a mi sin saber que hacer.

       -¡Tenemos que hablar seriamente July! Sobre la mentira que me dejaste en este papel – y de mi bolsillo trasero del pantalón, saqué la nota que me había destrozado el corazón una noche anterior.

       -¡Creí que había quedado bastante claro! – dijo, claro con toda la mentira y dolor en sus ojos.

       -¿Qué? ¿Que me dejabas por que en realidad amas a Iker? Por favor Juliet. ¿Crees que me la voy a creer?

       -¡Hablo en serio Joe, solo te quiero como amigo y nada mas!

       -¿Y supongo que Álvaro Ortiz o mas bien Álvaro Sánchez no tiene que ver con esto?

Simplemente, se quedó boquiabierta con lo que le dije. Obvio, esto era para largo. Teníamos que hablar.

(JULIET)

       -Le dije a Alex que no abriera la boca… le dije que… ella me lo juro – empecé a decir, pretendiendo no perder el control y no alzar la voz. Caminaba por toda la habitación como loca, agarrándome el cabello en señal de desesperación. Decía incoherencias y estupideces, hasta que Joe me detuvo y me cerró la boca con su mano.

       -¡Alex no me dijo nada que no supera! – Me dijo mirándome a los ojos – todo esto lo supimos antes de que ella nos dijera algo referente a esto. Solo que cuando te cuente todo esto, prométeme que no te enfadas ni te exaltaras, a menos que tu padre nos escuche me y me eche a la calle ¿de acuerdo?

Asentí con la cabeza y él me retiró la mano de la boca. Tomé asiento en mi cama, mientras él acercó mi silla del escritorio para quedar frente a mí.

(NICK)

La pobre Alex estaba frente al ventanal de su departamento, viendo hacia el horizonte con taza de chocolate caliente en mano. Sus ojos estaban perdidos, como si las estrellas pudieran darle respuestas a sus interrogantes.

       -¡Debes descansar Alex! – le dije mientras yo caminaba hacia ella.

       -No tengo sueño – no me miró. Estaba avergonzada.

Me puse a su lado, recargado en el marco de la ventana, sin tocarla, solo la miraba y contemplaba su cara de vergüenza y preocupación. A pesar de ello, se veía hermosa, o será que estoy muy enamorado para encontrarle algún defecto.  

       -¿Qué? – ahora ella me miraba.

       -Estoy esperando.

       -¿Qué estas esperando?

       -Me re ofrezcas una disculpa. – le dije. Sabia cual seria su reacción.

       -¿QUÉ? ¿Y como de qué esperas que me disculpe? – alzó la ceja. Ahora recordaba que tenia chocolate caliente en la taza que tenia en sus manos, podría ser un arma letal en contra mía.

       -Digamos por evadirme desde hace 24 horas, y… ah, esconderme la verdad acerca de este asunto con July.

       -Ya te dije que lo había jurado por mí todos mis seres amados, incluido tú. Así que ni creas que te daré una disculpa por haber cumplido mi promesa.

       -Cariño. ¿Cuándo me has ocultado algo importante? Desde que nos conocimos, siempre me has contado todo. Claro esta, excepto lo que las cosas de chicas que siempre has hablado con Juliet. Pero de ahí en fuera, todo me has dicho.

       -¡Si Nick! Pero esto… - parecía que quería llorar.

       -Mira – la interrumpí – sé que lo hiciste por que ella te hiso jurar, pero de todos modos, es por su seguridad. De una u otra manera, nos hubiéramos enterado, y lo mejor de todo es que fue de que antes de que July se casara. ¿Sabes en que peligro se estaba metiendo, ella sola?

       -¡BASTA NICHOLAS! ¡POR FAVOR! – Gritó alejándose de mi poniendo la taza en la mesa y llevándose las manos hasta el rostro, había estallado en llanto, tomando asiento - ¿Crees que es fácil saber que la niña con la que crecí, que me dio espacio en su vida y que prácticamente por ella tengo todo lo que tengo, vaya a hacer un sacrificio mas por mi? ¡Claro que no! Es horrible de tan solo pensar que esta arriesgando su felicidad por nosotros su familia. No sabes de verdad como me siento, así que me mejor cierra la boca y no me hagas sentir peor de lo que me siento. Creo que hasta la misma mierda esta en mejores condiciones que yo.

La pobre estaba muy mal. Ahora el que se sentía mierda era yo por haberle de cierta manera reclamado. Me dirijo hacia la mesa, tomo una silla y me siento tomando una de sus manos.

       -¡Perdón Alex! No quería ofenderte. Es solo que yo también tengo miedo que a nuestra amiga le pase algo y me sentí algo excluido al no saber la verdad. Pero ahora te entiendo, y de verdad te pido perdón,

Ella me miro.

       -Esta bien Nick. – puso su mano libre encima de la mía, y yo hice lo mismo.

       -Además, la mierda es algo que es desagradable a la vista y al olfato, pero tú, eres bella en todos los sentidos, así que no te compares con eso por favor. – por fin le arrebaté una sonrisa y un rubor adorable en sus mejillas - ¿Ves? Te ves más hermosa cuando sonríes.

(ALEX)

Después de aquella discusión, me sentí bien saber que él estaba preocupado por mi y por nuestra mejor amiga.

       -No me sentí nada bien escondiéndote esto pero créeme, lo hice por tu bien. Si Álvaro supiera que ya saben lo que pasa por su mente… NO…

       -¡Tranquila cariño! No nos pasará nada. No creo que pueda matar a mas de 10 en un solo día. Ya todos sabemos sus planes y como un equipo, nos vamos a ir en contra de él. Con nosotros no puede, además, recuerda que esta en nuestros terrenos, así que no hay nada que temer.

Le acuné su perfecto rostro con mi mano.

       -¿Cuándo fue la ultima vez que te dije que te dije “te amo”?

       -¡Desde que comenzaste a evadirme! – hiso un adorable puchero.

       -¡Tonto! – y le me acerque dándole un beso, pretendiendo ser rápido, pero creo que él quería un poco mas de prolongación y dedicación.

       -¡Te amo Alex! Tanto que daría mi vida por ti.

       -¿Por qué se te ocurre decir eso en este preciso momento? – me levanté, pero él no me soltó, y me jaló de tal manera que quedé sentada en sus piernas.

       -Por que es verdad mi Alexandra adorada. ¡Tanto te amo, que daría todo por que tu estuvieras conmigo!

       -Pues por el momento, me conformo con un beso. – claro, me lo dio – bueno, otro mas. – me lo volvió a dar…

       -¿Qué te parece si mejor nos vamos a algo mucho mas interesante? – arqueó la ceja. Y cuando quise saber que era lo que pretendía, me besó de la manera que mas me volvía loca, me tomó en sus brazos, se levantó de la silla y caminó por el pasillo.

       -¡El sillón no es cómodo! – con eso me dejo muy en claro que era lo que quería, y claro esta, NO ME LE IBA A NEGAR.

FAVOR NO MOLESTAR.

(JULIET)

Joe, sus hermanos y los del clan lo sabían todo. ABSOLUTAMENTE TODO.    

A un principio, quería molestarme por que Joe había dejado que el investigador estuviera al pendiente de los movimientos de los Ortiz. Pero al saber que “Publick Heart” era del mismísimo Álvaro, se me quitaron las ganas de reclamar.

       -Definitivamente este tipo quiere llegar a vernos en el mismo averno.

       -Pues no se saldrá con la suya. Mañana todo eso se sabrá. – me dijo seguro.

       -¡NO JOE! ¡MI PADRE! – fue lo primero que dije.

       -¡Debe de enterarse de la clase de basura con la que quiere emparentar!

       -Por favor. Ya tengo un plan.   

       -¿Cuál plan? ¿Casarte con Iker y vivir una mentira? ¡Por favor Juliet! No seas tonta.

       -¿Qué otra cosa puedo hacer? Es mi familia.

       -Lo sé, pero no has pensado en otra cosa.

       -¿Cuál? – le dije cruzando los brazos.

Parecía que lo que me diría era bastante difícil para él. Pero aun así, lo dijo, haciéndome que prácticamente le diera la razón.

       -¿Crees que no quiera que pronto le des un nieto? – DIOS MIO. Eso no lo había pensado, solo abrí lo ojos como platos a ver esa gran posibilidad.

       -¿Un nieto? ¿Un hijo? ¿Yo? – instintivamente me llevé las manos al vientre.

       -¡Álvaro esta a la antigua! Yo creo que la siguiente amenaza será “¡si no tengo un nieto pronto, Robert se muere!” y así se irán yendo hasta que les entregues la vida entera.

Tenía toda la razón. Primero era la boda, luego la empresa, ¿y luego que seguía? ¿Tener que acostarme con Iker para tener un bebé? ¡Yo no quería tener un hijo con él! Seria lo único que definitivamente tendría que negarme.

       -¡NO! No tendré hijos con él. No, esto no puede seguir.

       -Por eso mañana tendré que intervenir. No permitiré que te cases.

       -Pero Joe. ¿Qué hay de tu seguridad? No pienses en ti. Piensa en Papá y Mamá (Jonas), es Kev, Danielle, Grace, Nick… no Joe. No seas egoísta.

       -¡Es que no sé que hacer! No puedo ver que te casarás con alguien que no amas. – una lágrima corrió por su mejilla, y yo la enjugué con mi dedo.

       -Lo único que si te puedo decir, es que la nota que te dejé simplemente es mentira. ¿Cómo podría dejar de amarte? – Me miró detenidamente a los ojos – Joe, buscaré la solución a todo esto. Me casaré o a ver que pasa. Pero si he de morir, quiero que sepas que eres el único hombre que podré amar.

       -¡Yo también te amo July! Y mas que a mi vida – después de que nuestras frentes estuvieran juntas por unos cuantos segundos, nos dimos un beso que juro que era o único que podía hacerme sentir viva. Lo demás no me importaba, además, si hoy era la última noche en libertad, la tenia que disfrutar. Así que lo induje a seguirme besando, provocando que todo el amor que teníamos el uno por el otro, siguiera su curso.

(JOE)

 

       -¿Aquí? – pregunté al ver que era lo que quería después de una buena dosis de ardientes besos.

       -¿Dónde mas Joseph? – hiso algo que me sacó de duda, se quitó la bata, dejándose el camisón - ¿O qué? ¿Te me vas a negar? – la miré de arriba hacia abajo, expuesta ante mi. Simplemente se quité la camisa, quedándome solamente en pantalón y le ataqué los labios con demasiada pasión contenida.

       -¡Hazme el amor como si fuera la ultima vez que lo harías! – me dijo entre besos.

¿Cómo negarme ante esa petición cuando ya habíamos llegado a un punto donde no había marcha atrás? Tal vez esta seria la última vez que estaríamos juntos, por que tal vez estaríamos muertos mañana. No, esta noche tenia que ser especial. Yo era suyo, ella era mía, era lo único que me podía importar.

Son las 7 de la mañana. Aun no salía el sol, y yo ya me estaba vistiendo. Ella seguía envuelta en las sabanas, y yo, con el corazón sangrando.

Me estaba poniendo los zapatos, cuando sentí su mano en mi espalda.

       -¿Ya te vas? – me dijo poniendo su mentón en mi hombro.

       -Si. No creo que sea agradable que tu padre me vea aquí, y mucho menos que tu estés así, sin ropa.

       -¿Estarás cuando este a punto de arrojarme al fuego? – me dijo acariciando mi cabello.

       -¡Contigo hasta el mismo infierno! – me volví un poco, y la besé de manera tierna en los labios.

       -¡Te amo Juliet Marie Luca!

       -¡Yo mas Joseph Adam Jonas! – y la abracé antes de salir a hurtadillas de su habitación, utilizando la misma estrategia de cuando había entrado.

Dentro de unas horas, habría sentencia de muerte. Dentro de unas horas, esto se iría al demonio, aquí es cuando un hombre demuestra de lo que esta hecho.

Prensa

Hoy es un día especial para todo el Business World. Los jóvenes empresarios Juliet Luca e Iker Ortiz hoy “firmaran su contrato” de por vida, volviéndose marido y mujer.

El círculo mas selecto de todo Illinois se dará cita en el The Ritz-Carlton Chicago para ver como esta flamante pareja del mundo de los negocios contrae nupcias.

(IKER)

Y aquí estoy ante el espejo, poniéndome el saco del esmoquin negro. Me sentía con demasiado dolor dentro de mí. Se supone que este día debería ser el mejor de mi vida, pero ¿Cómo estar feliz, sabiendo que la mujer que amo se casa conmigo por evitar que su padre muera gracias al loco de mi padre? Eso no alentaba las cosas para nada.

       -¡Pronto muchacho “Luca & Cía.” Será nuestra por todas de la ley. Y tú estarás casado con la mujer que tanto amas – Álvaro hasta lo decía con una sonrisa burlona en su rostro.

       -Si, era lo que querías. – le dije acomodándome el moño.

       -¿Y tú querías casarte con ella? ¡Vamos Iker! Es una verdadera joya, además de bella, es inteligente y será muy buena esposa.

Yo simplemente pretendía no enojarme más, por que les juro que estaba a punto de estallar.

Llegó Ed ya vestido con su traje, traía la rosa blanca que iría en la solapa de esmoquin.

       -¿Listo hermano para hacer el mejor negocios de nuestras vidas? – parecía que estaba muy entusiasmado con ello. Claro, me había contado de sus planes, que según eso después de tener su parte de la empresa, se iría a recorrer todas las playas de América y disfrutaría del mejor sexo del mundo.

En cambio yo, tendría que irme a Madrid y ver los puntos débiles de mi padre para poder evitar que se quedara con la compañía.

       -Será mejor que nos vayamos. El novio no tiene que llegar tarde, por que no tiene que dar la señal de que se ha arrepentido. – Tomó su sombrero de copa y su bastón – ah, por cierto muchacho… ¡Espero que en la noche de bodas te esmeres y que satisfagas a tu esposa!

       -¡Papá! ¿Por qué dice eso? – rápidamente conteste con un rubor exagerado en mi rostro, sabiendo que esta noche seria como cualquier otra.

       -¿Qué no es obvio? ¡Quiero lo más pronto posible un nieto! – sonrió con un brillo de esperanza desconocida en su rostro y del brazo de mi hermano menor salieron de mi habitación, dejándome ahí ante el espejo atónito. - ¡Apúrate Iker! – volví a escuchar su voz.

¡MALDITA SEA! No conforme con el matrimonio, la empresa, y todo el dinero… ¿ahora quería un nieto?

Sonaba hermosa la idea. Un pequeño con mis ojos, con el cabello castaño y amante del futbol. O tal vez una nena que se parezca a July, y que tenga carácter imponente… Pero esperen ¿Y arruinarle la vida a un niño que pueda sufrir mucho por culpa de las estupideces de su abuelo? ESO JAMÁS.

Esto se tenía que terminar pronto.

(NANA PAZ)

Casa Luca.

Ahora July amaneció de mejor aspecto. Supongo por que estuvo hablando con Joe. Cuando llegué a la habitación hoy por la mañana, ella estaba levantada y ya había tomado un baño.

Ahora estaba ante ella ayudándola a colocarse el vestido de novia, ya estaba maquillada y peinada. Parecía toda una muñeca de porcelana, pero a pesar de estar radiante, la mirada triste era notoria, aunque debo aclarar que ayer se veía peor.

       -¿Joe vendrá a al boda?

       -Es mi padrino Nana, tiene que venir.

       -No entiendo como soportará ver que te casarás con otro por culpa de ese infeliz.

       -Hablamos de ello anoche Nana. Él sabe que lo amo y que jamás estaré dispuesta a perderlo. Hoy simplemente es un negocio más que tratar.

       -¿Juliet? ¿Estas lista? – la voz de mi padre se escuchó detrás de la puerta.

       -Si papi. Espérame abajo. – suspiró mi pequeña.

Escuché que iba bajando las escaleras. En eso, Alex entró a la habitación con su vestido en color beige hasta la rodilla y mi ramo de flores.

       -¡Es hora amiga mía! – me decía con media sonrisa en el rostro.

       -Estaré abajo esperándolas – nos dio un beso en la mejilla a cada una y nos dejó solas.

-Supongo que ayer tuviste una charla con Nick. – le dije mientras me arreglaba el moño.

-Si, y estaba molesto por que no le dijimos nada, pero todo esta arreglado.

Me ayudó a bajar del pedestal y me entregó el ramo.

       -Ha llegado la hora – dije tomando respiración.

       -Demostremos de que estamos hechas amiga. – me dio la mano en señal de apoyo.

Ahora bajo las escaleras poco a poco ante la mirada de todos aquellos empleados que me han visto creer. Algunos ya estaban tomando fotografías, mientras yo, simplemente sonreía escondiendo le pánico que tenia.

Mi padre era el que mas me miraba, pero por alguna razón, sentí que aquella sonrisa que me estaba mostrando era fingida.

       -¡te ves hermosa July! – me dijo tomándome de la mano cuando llegue al pie de la escalera.  – Muy bien, ¡Ha llegado la hora! – no me dejó ni hablar, solo me apresuró para que nos fuéramos para llegar pronto al hotel donde en unos de los salones se llevaría a cabo la ceremonia.

Ya íbamos recorriendo las calles de Chicago directamente al centro.

       -Debo de decir con todo respeto mi querida July que se ve muy linda – dijo Max el chofer que siempre ha estado conmigo desde pequeña.

       -Muchas gracias mi querido amigo. – le dije escondiendo mi tremenda tristeza dentro de una sonrisa muy fingida. Él siguió con la vista al frente, mientras yo, me llevé la mano hacia mi cuello, en ese instante, recordé que no llevaba el collar de oro que mi madre me dio y me dijo que con este tenia que casarme.

       -¡DIOS MIO! – dije. – ¡NO TRAIGO EL COLLAR DE MAMÁ! – pero a decir verdad, no me importaba mucho, pero lo dije para que a mi padre viera que me importaba esta boda como tanto quería.

       -¡Mi pequeña! No te preocupes, estoy seguro que a tu madre no le molestará, si lo llevas el resto de tu vida contigo.

Me quedé sorprendida, mi padre no estaba histérico. Sabia que yo tenia que casarme con ese collar ya que él se lo regaló día antes de casarse y ella lo utilizó el día de su boda. Eso me pareció extraño; pero no tuve tiempo de preguntar, ya que una oleada de flashes y tumulto de periodistas anunciaron que habíamos llegado al Hotel.

       -¡Show time pequeña July! – me dijo mi padre, tomándome de la mano, apretando ligeramente los dedos.

(JOE)

Alex llegó, anunciando que vendría la novia. Estaba muy desesperad, había mucha gente de todo el Business World rodeándome, diciendo que era la boda del año, que era un magnifico negocio y que todo esto seria para el bien de ambas compañías que hoy han de coalicionar.

       -¡Demasiada gente! ¿Crees que sea buena idea? – decía Sam que llegó bebiendo un Martini muy seco.

       -Tenemos que hacerlo – decía Kevin que también estaba bebiendo, creo que era para darse valor. Danielle estaba a su lado, y ella ya sabia de todo esto.

       -Pobre de July, ya me imagino como ha de estar. – Dani le quitó la copa a su marido y la bebió de un trago. Compartía el nerviosismo con nosotros.

       -¡Estoy nerviosa! – Alex con nosotros. –Necesito una buena dosis de vodka ahora.

       -Ni lo sueñes Alex, por que si tú bebes, yo lo haré y no quiero eso. – dijo Nick.

       -¡Chicos! Tienen que irse hasta atrás, creo que ya llegó July con su padre y ustedes serán los primeros en entrar como padrinos que son. – dijo Eddy.

       -¡Demonios! – Dijo Dani en voz baja - ¡Llegaron los Ortiz! – era cierto. Padre e hijos llegaron, pero rodeado de guaruras; estaban en la parte de atrás saludando a varios de los presentes. En automático, mis puños se cerraron al ver al hombre que estaba a punto de arruinarle la vida a la mujer que amo.

En ese instante, me percaté que Edgar miraba a mi hermano con su novia con un odio inimaginable, mientras Alex le quitaba algo de los labios a Nick con sus dedos.

       -¡Viene con sus matones! – dijo Downey que se había mezclado con nosotros como invitado a la ceremonia.

Claro, pude notar las armas de fuego que tenían, los chicharos para comunicarse entre si, y claro, la cara de mafiosos que se cargaban.

En ese momento, pasó un mesero con varios vasos de vodka en las rocas y todos los presentes tomamos una.

      

       -Un brindis chicos, por los que moriremos el día de hoy – dijo Kevin nervioso. Nadie puso alguna objeción al brindis. Así que chocamos los vasos y lo tomamos de un golpe.

 

Sentí como Alex me tomó de la mano y caminamos hasta la entrada del lugar, donde estaban dichos hombres.

-¡Buenas tardes! – saludó Ed con recelo.

-¡Hijos míos! – alzó los brazos como si le diera gusto vernos el viejo Ortiz.

-¡Buenas tardes! – saludamos con educación, mas no con ganas.

-¿Están listos? – debo admitir que Álvaro era un maestro para esto de ser hipócrita.

-¡Siempre Mr. Ortiz! – le dije.

-¡Excelente!

“Llegó la novia” dijo uno de los empleados. Había llegado el momento. Todo el mundo comenzó a acomodarse para recibirlos.

Iker estaba muy serio, lo veía muy callado y molesto consigo mismo. Antes de que nos acomodáramos, se acercó a mí.

       -¡Pase lo que pase, tienes que prometerme que estarás con Juliet! – me dijo en susurro.

       -No tienes necesidad de decírmelo – si como si fuera un reflejo, ambos contrincantes nos dimos la mano.

La música inundó le momento. Los primeros en caminar por el pasillo, fueron Iker y su padre, todos los presentes lo miraban con gran respeto, algo que no merecía el maldito.

Nick y Alex entrarían juntos, mientras yo iría a lado con Ed. Pude notar el coraje con el que miraba a mi hermano menor.

       -¡Mas te vale que te comportes Edgar! O créeme que verás tu suerte – le dije en voz baja.

Simplemente, el muy cínico sonrió.

       -¡El que verá su suerte es otro! – estaba a punto de ponerle una mano encima, cuando llegó nuestro turno. Caminamos hombro con hombro por el pasillo sonriendo de manera forzada, claro esta.

Llegamos al final, lo miré, me miró y nos dividimos para que Iker se sentara de lado donde estaría Iker, mientras yo me fui a sentar a lado de mi hermano, de Alex y de Nana Paz que no quería sentarse a lado de Don Robert y mucho menos la lado de Álvaro.

       -¡Mi niña Joe! ¡Mi niña! – me dijo cuando estábamos los dos ahí juntos.

       -¡Todo saldrá bien Nana! – traté tranquilizarla, pero el que necesitaba un buen calmante y algo de tequila, era yo.

Un fuerte suspiro de Alex salió a flote, sentenciando lo que menos quería…

 

La música cambió, haciendo que todos los presentes se pusieran de pie. Miré rápidamente hasta la parte de atrás y vi lo que me rompió el corazón en miles de pedazos.

Ahí estaba la mujer de mi vida, caminando por el pasillo tomada del brazo de su padre. Don Robert sonreía, mientras el rostro de July estaba cubierto por el velo. Pero sabía que estaba deshecha por el hecho que estaba a punto de cometer un suicidio ante todos los presentes.

El más sonriente de todos, claro esta era Álvaro Ortiz, que ya disfrutaba de que el negocio era un hecho y que finalmente había ganado lo que tanto le había costado. Iker intentaba sonreír, pero no podía, ya que sabia que July no venia por voluntad propia.

(JULIET)

Aquí voy, del brazo de mi madre con el miedo de no caer, pero no de nerviosismo, mas bien de quería escapar y que los malditos tacones no ayudaban para nada. Todos ahí me miraban con una sonrisa en el rostro, con la seguridad querer compartir mi alegría.

Y en aquel mar de gente, vi como sobresalía rostro del hombre que en realidad quería ver y que daría mil veces mi vida con tal de que el hombre que me esperaba al lado del pastor fuera él y no Iker que parecía que también quería salir huyendo de ahí.

Tenia que parecer que estaba caminando hacia Iker con paso firme para que mi padre no sospechara que yo estaba con todo la presión del mundo.

Ahí esta Joe mirándome caminar por el centro del pasillo, todo el mundo desapareció y solo estaba él y yo esperando que lo que viniera fuera solo una maldita broma.

Llegamos ante Iker y el pastor que sonreía más que el mismo novio se los puedo jurar. Claro, sabia que esto solo lo hacia por salvar a mi padre y que yo amaba a otro.

       -¿Quién entrega a esta mujer? – pregunta el pastor.

       -¡Yo! – dijo mi padre. Pero solo me entregó con Iker y ni siquiera dijo unas palabras como todos los padres le dicen a sus futuros yernos. Eso fue muy extraño, pero aun así, proseguimos con la ceremonia.

Iker me tomó de la mano. Me volví por un instante y verle la cara a mi peor enemigo y al hombre que estaba a punto de arruinarme la vida. Me dio una maquiavélica sonrisa, haciendo que la herida que tenía por dentro se abriera aun mas.

(JOE)

Iker le quitó el velo del rostro y pude ver aquellas perfectas facciones que tanto amaba envueltas en maquillaje y con el toque de melancolía que sabia que tenia.

 

Mi mundo dependía de un hilo. Ella estaba frente a mí vestida de blanco a punto de casarse con el hijo de nuestro peor enemigo.

El pastor comenzó, Nana Paz y yo nos tomamos de la mano.

       -Estamos aquí reunidos para unir en santo matrimonio a este hombre y a esta mujer. Ahora les pregunto ¿Están aquí por voluntad propia?  - contuve la respiración…

       -Si – dijo Iker. Juliet lo dudó por un segundo y me echó una mirada rápida.

       -Si – finalmente dijo pero en el tono que me esperaba.

       -Me parece bien. ¡Comencemos ya que no hay ningún inconveniente!

Un suspiro, un pesar, un idiota que teníamos que derrocar. Todo el mundo estaba con las ganas de escuchar los votos y la entrega de anillos.

Ella me mira, yo la miro. Ambos recordamos la noche anterior que nos entregamos de nuevo pero con más amor de lo que había sido.

“Solo hazlo” la voz resonaba en mi cabeza. “Tienes que impedir esto”.

Miré a mis hermanos, a mis amigos… todos parecían dispuestos a correr el riesgo de salir muertos de ahí.

“YO TENGO INCOVENIENTE CON ESTA BODA”

Fue lo que interrumpió ante aquel salón…

HASTA AQUÍ…

Si, supongo que me han de odiar, pero creo que es mejor dejarlas en suspenso…

Además, como  esta novela esta a poco de terminarse, creo que es mejor que le demos el picante que merece…

¿Cuál será el resultado de la oposición? ¿Habrá muertos o heridos? ¿Acaso Álvaro se saldrá con la suya? Tendremos que esperar el próximo capitulo

Si, casi termina “Check Yes Juliet” pero hoy 5 de enero, se anunciará quien es la protagonista de la siguiente novela a lado de Kevin Jonas “Love You Out Loud”…

Así que, para que se vayan dando una idea de como será el siguiente proyecto, les dejo el promo inicial… COMPARTALO...

Dale Click y Escucha #ArenitaCrewOnRadio

UN BESO A TOD@S.

GRACIAS TRIPULACIÓN. TODAS SOMOS #ARENITACREW