Memorias De Un Café (42º Parte) NickNovela

Chic@s  COMENTEN Y NO OLVIDEN DARLE RT --------------->


IMPORTANTE: NO ME HAGO RESPONSABLE DE POSIBLES PAROS CARDIACOS O TRAUMAS EXISTENCIALES xD


Cuando notas que la persona que mas amas corresponde de la misma manera, o te da más de lo que esperas, te das cuenta de que el miedo solo es una estúpida emoción que tienes tirar directamente a la basura, porque te das cuenta que a lado de dicha persona, estas completamente a salvo.

Christmas Gifts

#Imagina

(NICK)

Si chicas, estoy de regreso a NY. Después de haber pasado Nochebuena con mi familia, decidí que Navidad era para mi novia.

Ya un mes sin verla, esto era INSOPORTABLE.  Las tantas ganas de abrazarla y de estar con ella en este día tan especial, me consumían.

Pero no iba a llegar con las manos vacías. Hoy es cuando por medio de algún regalo, se le demuestra a la personas lo mucho que te importas.

Angie no iba a ser la excepción de entregarle un presente en esta fecha tan importante como es navidad.

Por eso le pedí de nuevo ayuda a la Sra. Parkin para poder entrar a la casa y dejar la cajita que contiene la dichosa llave que pronto se dará a conocer que es lo que abre.

Cuando anduve por las calles, me encontré con el rostro de mi chica en la portada del NYT Style Magazine en un puesto de periódicos que estaba abierto. Y a decir verdad, en persona es aun más hermosa de lo que lucía en dicha portada.

***: - ¿A poco no es linda? – me pregunto el hombre en el puesto de revistas.

N: - Más que linda – afirmé. – es la mujer más hermosa del mundo.

***: - ¡Vaya chico! ¡Has de estar enamorado de sus artículos! ¿Y quién no? Es una excelente escritora. Ahora que el mundo vea el rostro de esta chica, verán que la inteligencia y la belleza, causan una increíble mezcla.

Y aquel hombre tenía toda la razón. Más que hermosa, más que inteligente. Era mi chica. MI ÁNGEL. MI ANGIE.

(ANGIE)

En cuanto pude volver a respirar,  rápidamente  subí a arreglarme. Y si Nick quería que fuera algo guapa, pues tal vez se decepcionaría.

Mi guardarropa gracias a las chismosas de Lizz y Lilly había cambiado. Porque según ellas “ya seria figura pública, y tenía que cambiar estilo”. Y si, lograron que me gustara.

Opte por unos Levi’s y un sweater bastante abrigador color blanco. Y unas botas por lo mismo de la nieve.

Me iba a llevar el coche, pero Dalilah me recomendó que pidiera un taxi. Que sería mucho mejor.

Y si, la obedecí. Ella se me adelanto y pidió uno a la estación. Y para mi suerte, Tim el chofer que ya conocía estaba disponible. Antes de salir de casa, tomé el regalo que le había comprado a Nick, para en caso de verlo, entregárselo de una vez.

T: - Angie. Feliz Navidad

A: - Feliz Navidad Tim.

T: - ¿A dónde desea que la llevé el día de hoy!

A: - Necesito ir a Rockefeller Center.

Y sin más, aceleró llevándome a dicho destino.

Cuando llegué al Rockefeller Center, Tim quería acompañarme, porque no quería que anduviera sola en un lugar que no estaba siendo transitado. Pero no accedí. Además, sabía que Nick no permitiría que me pasara algo malo.

Tim tenía razón. Había muy pocas personas que transitaban por ahí. El paisaje blanco y en medio de este, el colosal árbol de navidad me llenaba la mirada.

Los ángeles que aguardaban el lugar me saludaban a pesar de que no estaban encendidos con la luz que se les caracteriza.

La pista de patinaje estaba desierta. Bueno ¿Quién esta tan temprano fuera de casa amaneciendo el 25 de diciembre?

Fui a la parte trasera del árbol para hacer lo que me decía “San Nick” esperar a los pies del Árbol de Navidad. Pero no tuve que esperar mucho, ya que…

“Disculpe señorita, ¿Angie Halle?”

A: - ¿Si? ¿Quién es usted?

***: - “San Nick” le manda esto.

Me entregó otro sobre color dorado al igual que el anterior.

Veo que no demoró mucho. Ahora tendrás que ir a otro sitio, pero no iras sola, un amigo te acompañara. Y no, no es la persona que te entregó este sobre, si no otro que va sobre ruedas.

A:- ¿SOBRE RUEDAS?

A continuación, el señor que me había entrego el sobre, sacó de su bolsillo unas llaves al parecer de un coche.

***: - Continué leyendo por favor – me animó.

Proseguí.

Ahora tendrás que dirigirte a esta dirección. Solo conduce con cuidado. Creo que te darás cuenta que es algo lejos xD pero creo que te encantará.

833 Meadow Rd / Smithtown, Long Island

 No demores. Te estoy esperando.

San Nick

***: - ¿Vamos? - Y me deje guiar por el hombre hasta que me llevó no muy lejos de ahí. – ya cuando estuvimos en un aparcadero, se paró en frente de una camioneta Land Rover modelo LR2 color negro.

A: - ¿Esto es lo que mandó? – le pregunte con un hilo de voz.

***: - Así es señorita. Ahora me despido. ¡Que pase una Feliz Navidad!

A: - ¡Aguarde! – pero cuando quería preguntarle su nombre, el señor desapareció.

Algo confundida, subí a la camioneta. Estaba preciosa y amplia. Jamás me había subido a una camioneta así. Pero volvamos a nuestro asunto… Ya que con la dirección en mano, y gracias a que la camioneta tenía GPS, conducía hacia las afueras de Manhattan para dirigirme a Long Island.

Tarde como 45 minutos en llegar, pero llegué. Y les juro, que casi me iba para atrás.

Era un vecindario bastante hermoso a decir verdad. Todo esta cubierto de nieve.

Al llegar  a la dirección escrita, pude ver que en la cochera de aquella hermosa casa marcada con el 833, estaba una Jeep Liberty color negra.

Me dirigí a la puerta de la casa, donde a los pies de esta había otro sobre dorado.

Haz llegado. ¡Ya te estabas tardando!

Ahora, con lo que te dejaron al pie del árbol, abre esta casa. No te preocupes, los dueños no están. Disfruta tu regalo.

San Nick

¿CÓMO QUE LOS DUEÑOS NO ESTABAN? ¿ACASO NICK ESTABA DEMENTE? Estaba en propiedad privada. Bueno, eso parecía. La única manera de averiguarlo era entrando.

Así que, dudando un poco, abrí lentamente la puerta.

Si, en la casa parecía que no había habitantes, pero lo que me llamó la atención es que había muebles, muebles realmente lindos. Di unos cuantos pasos y me encontré con la sala que estaba siendo iluminada por un hermoso árbol de navidad y por el fuego de la chimenea. Arriba de la estructura de la misma, se encontraban 3 botas navideñas con sus respectivos nombres bordados con hilo dorado. "ELVIS" "NICK" y la de en medio "ANGIE".

El lugar estaba precioso. Y solo había visto la sala. Tenía ganas de explorar, pero me sentía extraña.

De repente, vi que en la mesa de centro de la sala, estaba una revista. Y no era cualquiera. Era NYT Style Magazine. Y ¡adivinen quien estaba de portada!

A: - ¡PUAJ! ¡Definitivamente no soy fotogénica! – dije en voz alta.

"¿Sabías que eres la peor mentirosa del mundo? Creo que necesitas tus lentes para ver mejor que chica tan bella está en la portada"

Volteé hacia atrás y lo vi. Mi novio llevaba un saco negro y bufanda, sus Levi's y botas negras. Estaba recargado en una de las columnas que estaban en la entrada de la sala.

Para cuando me di cuenta, ya estaba en sus fuertes brazos y casi sin respiración, ya que me estrujaba.

Lo empujé un poco y levanté la mirada para perderme en sus bellos ojos color marrón.

A: - Tenerte aquí, es el mejor regalo de navidad que puedo tener.

Y me dio un exquisito beso. La verdad, como necesitaba uno. Estaba dispuesta prolongarlo, pero por alguna extraña razón,  rápidamente lo terminó.

N: - Tienes que ver la casa. ¡Es preciosa! – Me tomó de la mano y me mostró cada punto de la planta baja de aquella linda casa. No paraba de hablar, de mostrarme el comedor, el jardín, la cocina, etc.  Parecía muy ansioso.

Cuando llegamos al pie de las escaleras, tuve que ponerle la mano en la boca para que se callara.

****DENLE CLICK CHICAS PARA QUE VEAN LA CASA. QUE POR CIERTO, ES REAL... el interior y el exterior es real****

A: - Tranquilo Nick. Parece que te están apresurando. ¿Acaso pasa algo?

Él guardo silencio. Parecía que estaba nervioso.

(NICK)

¡MALDITA SEA! NOTÓ MI NERVIOSISMO.

Bueno, de todos modos, tenía que enterarse algún día de lo que quiero hacer.

Así que decidí que ya era el momento. Estábamos ante donde tal vez, ella saldría corriendo.

Saque de mi bolsillo una venda.

N: - necesito que te tapes los ojos – le dije nervioso. Ella arqueó la ceja – sé que es mucho misterio, pero de verdad, quiero que te vendes los ojos.

A: - ¿Qué tramas Jonas?

N: - ¡Por favor! – Supliqué – y si no te gusta lo que te tengo preparado, lo entenderé.

Me quitó la venda de manos y trato de ponérsela. Pero le ayude para que no hiciera trampa. Me cercioré de que no viera nada.

N: - ¿Lista?

A: - ¡Vamos Nick! Si de por sí, no me arreglé nada, y tu arruinando el maquillaje.

¿QUÉ NO SE HABÍA ARREGLADO? Era la peor mentira que le había escuchado. Se veía tan hermosa con sus Levi’s y su sweater blanco. Se veía tan bella que de tan solo pensar que esta hermosa chica era mi novia, me sentía el ser más horrible del mundo a comparación de ella.

Subimos lentamente las escaleras, no quería que cayera al suelo. Cuando llegamos a la planta alta, la dirigí hacia una de las puertas que estaba al final del pasillo.

Esperemos que todo salga bien.

(ANGIE)

Solo pude sentir que después de las escaleras, caminamos un tramo algo largo. Me iba tomando de la mano, pero podía sentir que estaba nervioso. Su mano sudaba bastante, pero no sé porque, sentía que esto no sería nada malo. Al contrario.

Pude escuchar que abrió una puerta.

N: - Cuidado. – Me dijo apretándome la mano - ¡vamos a bajar un escalón! – y después, pude sentir que me soltó, le alejó solo un poco de mi  - ¿lista?

A: - ¡Anda Nick! – me estaba muriendo de curiosidad. De repente, pude notar un olor peculiar en el ambiente.

N: - Esta bien… ¡ya puedes quitarte la venda!

Obedecí y cuando finalmente pude recuperar la visión del todo, me di cuenta que en el lugar donde nos encontrábamos, había velas y rosas rojas por todo el lugar.

A: - ¡WOW! Es… es… ¿Dónde estamos?

N: - Es la estancia… Ejem… de la recamara principal.

Había una sala, también una chimenea y unas ventanas que daban al nevado jardín.

Las canastas y arreglos de rosas rojas eran las que causaban el olor que les había mencionado, mezclado con el olor de la cera de las velas que iluminaban la habitación. Pero lo que me llamó la atención, fue que cuando volteé hacia el lado contrario de la sala, fue la enorme cama que estaba libre de flores, solo estaba cubierta por un edredón blanco y unos cuantos cojines que la adornaban.

A: - ¡Dios Mío! Es increíble este lugar. Pero, sigo sin entender...

Me tapó los labios con sus dedos.

N: - Todo esto, es tuyo. - me dijo acariciando mi mejilla.

A: - ¿A qué te refieres?

Respiró profundamente y finalmente escupió

N: - Esta casa, los muebles, todo lo que soy, Es tuyo. Eres dueña de todo lo que ves.

Me entregó un sobre que contenía unos papeles. LAS ESCRITURAS DE LA CASA. ME ESTABA REGALANDO LA CASA.

A: - ¿Pero - por - qué? - le pregunté sin aliento. Me dejé caer en sillón.

(NICK)

Me senté a su lado. Estaba pálida después de que le entregué las escrituras de la casa. Si chicas, este era mi regalo de navidad. La casa la había comprado para ella. Los muebles me ayudó una decoradora de interiores. Pero todo estaba pensado en ella.

N: - Quería darte algo que te demostrara que quiero estar contigo. Que estoy dispuesto a lo que sea por vivir cada segundo de mi vida a tu lado.

A: - Pero ¿una casa? ¿Cómo se te ocurre?

Y antes de que dijera otra cosa, le mostré lo que tenía en mi mano. Era un anillo, pero no era cualquier anillo. Más bien era la mitad de un anillo.

Les explico. El anillo completo está compuesto por dos argollas que formaba uno solo. El diseño con ayuda de mi hermano Kevin lo había hecho yo. Le pedí asesoría, ya que él había diseñado el de su esposa. Entonces pensé “Si el tuvo la dedicación para hacer el anillo para su futura esposa ¿Por qué yo no? Además, quería que se compusiera de dos partes, dos mitades. Que representara nuestra historia. Dos personas que forman un maravilloso amor.

Ella se quedó sin habla al verlo.

N: - Este anillo está dividido en dos. Cuando los unes, forman uno solo. Así está lo he diseñado. Y te daré la mitad ahora y la siguiente cuando no te la mostraré hasta que llegue el día más indicado. Este es un “anillo promesa” que quisiera que la mujer que amo lo lleve  - ella no hablaba, así que aproveché para dar el golpe final. Y tragando saliva dije las palabras que tanto había ensayado ante el espejo - Angie Halle ¿quisieras ser la chica que esté con este patán lo mas que se pueda? ¿Quisieras ser mi prometida?

A: - Nick... Yo... - no podía articular frases enteras por la misma sorpresa. Y yo seguía temblando como idiota.

N: - Aun no te estoy pidiendo que seas mi esposa. Cuando te lo pida, tengo que darte la segunda pieza para formar el anillo de compromiso como es. Solo te pido que seas mi prometida.

Y unas lágrimas descendieron por sus bellas mejillas.

(ANGIE)

UN ANILLO “PROMESA”. ME ESTABA PIDIENDO QUE FUERA SU PROMETIDA. DIOS MIO.

No sabía que decirle. Hasta que me pregunto lo mas estúpido que jamás le había escuchado.

N: - ¿Acaso no te gusto? Sabía que era demasiado, pero... - ya no prosiguió.

Bajó la cabeza. Rápidamente le alcé con mis dedos.

A: ¿CÓMO TE ATREVES A PREGUNTAR SEMEJANTE TONTERIA? Nick, claro que me encantó todo esto. Por favor, es lo más hermoso que jamás imaginé. Y creo que el preguntar “¿acaso no te gustó? – Traté de imitarlo – es la peor tontería que me has dicho –  Me regaló una preciosa sonrisa.

N: - ¿Entonces?... ¿Qué dices? – preguntó sin dejar de sonreír, pero esta vez, se torno tímido pero seguro de lo que estaba haciendo.

Tomé un poco de aire, antes de emitir alguna palabra.

A: - Lo de ser tu prometida ¿es solo eso? Tu futura esposa ¿no?

N: - Eso será cuando termines tu carrera y cuando estemos más que preparados. Quiero que realices tus sueños y planes que tengas antes de dar este gran pasó. Entonces ¿quisieras darme el honor de dejar de ser solo mi novia y ser mi bella y hermosa prometida?

Lo miré. Podía notar que había una luz de esperanza en sus preciosos ojos. Eso me dio el valor para hacer lo que viene a continuación. Alzando mi mano izquierda, él tomo mi mano y mirándolo a los ojos respondí:

A: - En cuanto me coloque el anillo, oficialmente, soy su prometida Sr. Jonas. - y noté que la hermosa y amplia sonrisa que tanto amaba, apareció de nuevo en su rostro.

(NICK)

No demoré nada en colocarle la primera argolla en su dedo corazón. Cuando lo deslicé y posó en su mano, sonrió.

N: - Te amo Angie... Te amo

A: - Y yo, gustosa soy su prometida.

EL MUNDO ES MIO. TODO MIO. ANGIE HALLE ERA MI PROMETIDA.

Me levanté del sillón, hice que hiciera lo mismo y la abracé alanzándola en el aire. Comencé a besarle todo el rostro hasta que mis labios terminaron en los suyos. De repente, pude notar que me estaba empujando para que parara.

Pude sentir que me colocaba algo en la palma de la mano. Cuando miré, su anillo de la pureza que brillaba gracias a la luz de las velas.

Me sonrió de manera cómplice.

A: - Te entrego todo mi corazón. Cada latido, cada bombeo de sangre a todo mi organismo. Soy absolutamente tuya Nick Jonas. – esas palabras hacían que mi corazón latiera más de lo normal, pero esto fue lo que casi me causa un paro cardiaco – Pero me encantaría... - y susurrándome al oído de manera inocente y seductora a la vez exclamó lo que creí que jamás diría – y estoy segura de que quiero SER TUYA.

(ANGIE)

COMO LO LEYERON CHIC@S. TOMÉ MI DECISIÓN. El me estaba entregando su corazón por medio de un compromiso. ¿Por qué no hacer lo mismo? Además, ya no podía más. El amor y mi cuerpo exigían que fuera enteramente suya.

N: - ¿Estás segura? - me interrogó.

A: - Alguna vez estabas dispuesto a entregarme el tuyo. – Respondí decidida – Y la verdad, si me he de ir al infierno, con gusto me iré. Mi anillo de pureza... Es todo tuyo, y de nadie más. Te amo, y es lo único que sé. - la electricidad recorrió todo mi ser.

Sus ojos me mostraban el deseo que vi cuando estuvimos aquella vez en mi habitación a punto de... Pero ahora definitivamente ¡Estaba lista!

(NICK)

DIOS MIO. Sus ojos brillaban de manera sorpréndete. No dude ni un segundo más. La atraje más a mí y ataque sus labios con delicadeza. Ella colocó sus manos en mi cabello mientras deposite el anillo que me había entregado en la mesa para evitar perderlo. Al hacerlo, rápidamente mi mano regreso a su espalda para recorrerla hasta llegar a su cintura. Mi bufanda fue la primera en caer, y ya sentía sus manos recorrer los botones del saco. Mis manos se fueron directamente donde comenzaba su sweater, lo enrosqué y lo quite de encima.

(ANGIE)

Su saco rápidamente cayó al suelo a lado de mi sweater. Me despegué un momento de él para bajar el cierre de las botas y sacármelas a velocidad impresiónate, él también hiso lo mismo. Ahora descalzos y tomados de la mano nos pusimos frente de la preciosa cama. Pude sentir que sus manos llegaron a la parte más baja de mi espalda y de los glúteos me levantó para quedar a su altura y atacar sus labios de manera apropiada. (AMABA QUE HICIERA ESO).

Mis piernas rodearon su cintura mientras se sentaba en el acolchado y yo me dedicaba a quitarle su costosa camisa de manga larga para dejarlo con el torso desnudo. El rápidamente me quitó mi blusa para solo dejarme en sostén.

(NICK)

Ahora ya estaba encima de ella, besando su cuello hasta su vientre. Llegué hasta donde estaba el cierre del pantalón y lo saque al paso que mis labios iban subiendo hasta llegar a los suyos. Emitía leves gemidos que hacían que perdiera aun más el juicio. Ahora ella, me ayudaba con el cierre del mío, pero yo fui mas ágil y mi pantalón no tardó en acompañar al de ella que yacía en el suelo.

(ANGIE)

El miedo ya no existía en mi pensamiento. Ya no había marcha atrás, y lo comprendí aun más cuando pude sentir que mis pechos ya no estaban siendo presionados por el bra. Me miró, haciendo que mis mejillas se encendieran. También pude notar que él estaba sonrojado pero sonreía.

N: - Mi hermoso Ángel. Lo único que tengo ante mí, es belleza que no merezco ¿Quieres que me detenga?

Lo pensé por un segundo. Pero creo que mi cuerpo fue el que dio el primer paso. Mis manos se fueron directamente a su cuello y logré atraer su rostro hacia el mío, aprisionando suavemente sus labio inferior con mis dientes. Y creo que eso fue un grave error. Ya que esto ya se tornaba mucho más serio de lo que imaginaba. Yo estaba debajo de él, así que no tenia salida, y la verdad, me complacía saber que no la había.

(NICK)

Al momento de que mordió los labios, mi quicio se volvió añicos, aun más de lo que ya estaba. Ataqué desde su oreja y su cuello con mis dientes. Posé mis labios aun más abajo mientras mis manos analizaban todo su cuerpo. El acariciar sus suaves piernas me daban la certeza de que la deseaba más de lo que imaginaba. Cuando llegué a la última prenda que quedaba en su hermoso cuerpo, la hice desaparecer de manera olímpica. Y ella de la misma forma hiso que mi bóxer desapareciera. Ahora nuestros cuerpos totalmente desnudos acompañados por una capa de sudor se encontraban de la manera que siempre había soñado.

Me acomodé entre sus piernas y mientras nuestros labios estaban en una deliciosa guerra, sentí que ya estaba dentro de ella. Estaba ante las puertas del mismo paraíso.

Sus uñas se clavaron en mi espalda, enloqueciéndome aun más.

(ANGIE)

El dolor comenzó, sabía que esto pasaría. Sí, Nick estaba siendo bastante cuidadoso, pero no podía negarlo, el dolor era intenso. Y sin querer, las lágrimas que tanto estaba evitando, salieron.

N: - Mi amor. ¿Me detengo? ¿Te estoy dañando? – QUE NI SE TE OCURRA.

A: - N- no. - le estaba mintiendo - no pares. - y volví a besarlo para que comprendiera que quería que siguiera. Al paso de los suaves movimientos que hacía con la pelvis, el dolor disminuía y el placer de tenerlo dentro de mi comenzaba a inundar mi cuerpo. Su muy bien trabajada, sexy y fuerte *--* espalda era víctima de mis rasguños. Era la sensación más increíble que había tenido. Ahora ya no gemía de dolor. Era el placer mismo que pedía que no terminara.

(NICK)

Los dos estábamos con el éxtasis a 1000. Ahora esto ya no era suave. Esto exigía velocidad, no mucha, pero la bastante para prolongar aquel momento que juro que no quería que llegara a su fin.

N: - Te Amo. Te amo. – le decía mientras atacaba sus labios con violencia seductora

Así paso el tiempo, que ambos disfrutábamos algo nuevo para nosotros, pero juro que era lo mejor que me podría pasar. Sus manos aprendían mi espalda mientras las mías todo su cuerpo.

El hacer el amor con la mujer que amo era algo que no cambio por nada.

Las lágrimas de mi ángel desaparecieron. Obvio, habían salido por el mismo dolor que de imbécil, le había causado. También tuve dolor, pero  poco a poco iba convirtiéndose el placer y también lo noté en ella.

Y llegó el momento que cumbre de nuestro hermoso encuentro, causando que ambos gimiéramos a una sola voz ya que finalmente entramos al paraíso.

Caí exhausto sobre su regazo mientras nuestra respiración seguía inconstante. Sentí que sus brazos me rodearon.

El ultimo recuerdo que tengo es que me acosté a su lado y rodeé mis brazos en su desnudo cuerpo mientras a la apegaba mas a mí y el sueño nos venció a ambos.

(ANGIE)

Cuando desperté, casi me pellizco por qué no sabía lo que había pasado, fue real. Pero al momento de sentirme desnuda, que estaba cubierta únicamente por las sabanas de aquella revuelta cama y los brazos torno a mi cuerpo y, la sonrisa se amplió en mi rostro. Me moví lentamente para poder mirar su rostro.

Su cabello estaba despeinado (gracias a mi :$) y estaba plácidamente dormido pero con una sonrisilla bastante peculiar. Lentamente me zafé de sus brazos y me levanté buscando algo con que cubrirme. Y lo primero que vi, fue su camisa de botones, así que me la puse. Me quedaba algo grande pero me alcanzaba a cubrir hasta medio muslo. Miré mi reloj, eran las 5:00 p.m. Ya era algo tarde.

Fui al baño a arreglarme el cabello que era caso perdido, así que me lo agarré en una coleta. Cuando regresé, la cama estaba vacía y noté que a lado de mi pantalón ya no se encontraba el suyo.

El ambiente estaba bastante agradable, al parecer Nick había encendido la calefacción.

Me dirigí al ventanal más grande y me quedé admirando el jardín cubierto por una espesa capa blanca, pero de tan solo pensar de como se pondría en primavera me ponía de aun mejor humor. Pero mis pensamientos fueron interrumpidos por que sentí que alguien por detrás me abrazaba por la cintura y me daba besitos en las mejillas. Finalmente, me susurró al oído.

"Que bella se ve con mi camisa Sra. Jonas"

Si de por sí, que mi hermano me lo haya dicho se escuchaba genial, ahora que mi novio me lo dijera... ¿imaginen como estoy? *-----*

Me volví hacia él y pude ver a Nick que solo estaba en pantalón de mezclilla. Su bello torso desnudo estaba expuesto ante mi. Me causo una sonrisa el tan solo pensar que ese bello cuerpo, ya era enteramente mío. Y claro, mi cuerpo y alma eran totalmente suyas. Y con esa idea en la mente, le di un rico beso de "buenas tardes" xD

Miré hacia su Dog Tag. Tomé entre mis manos su anillo.

N: - Espera… esto te pertenece.

Hiso el ademan que se quitaría la cadena, pero rápidamente lo detuve.

A: - ¿Qué haces? No.

N: - Pero mi amor. Esto es tuyo. ¿Qué? ¿Acaso no recuerdas lo que hicimos? – sonrió de manera picara, haciendo que me sonrojara. Y le di un golpe en su brazo desnudo.

A: - Nick. ¿Acaso no sabes que puede pasar si los medios se dan cuenta que ya no portas el anillo? ¿TUS PADRES? No, es mejor que aun lo tengas puesto. – y devolviéndome la sonrisa seductora – será nuestro pequeño secreto.

Besé su nariz.

Se dirigió a la mesa y tomó algo entre sus manos. Volvió ante mí, alzó mi mano izquierda, quitó mi anillo de compromiso y colocó mi anillo de la pureza en su lugar, seguido del otro anillo. En seguida, los besó.

N: - Un secreto que será un placer guardar. – y esta vez, atacó mis labios. Y esto se estaba tornando interesante, pero desgraciadamente, lo tuve que separar.

(NICK)

N: - ¡OYE! – instantáneamente reclamé al sentir su rechazo.

A: - Nick. Es tarde, y tenemos que regresar. ¿Acaso no sería extraño que no llegáramos pronto? Tenemos que ser inteligentes. Además, tengo que ir a casa de papá. Le prometí a Bells que iría a ver que le había traído Santa.

Y se deshizo de mi abrazo para poder recoger su ropa.

A: - Tengo que vestirme. – y se dirigió al baño.

N: - ¿Para qué te escondes? Además, necesito mi camisa.

A: - Ya que entre al baño te la paso.

N: - Mejor vístete aquí y sirve que me das en la mano. – le dije con voz extrañamente seductora. Se sonrojó, pero supo como atacar.

A: - ¿Ahora cree que por el hecho de que soy su mujer puede mandarme? Eso ni lo sueñe.

Se metió al baño, en menos de dos minutos, entreabrió la puerta, y con una espectacular puntería, me dio con la camisa en la cara.

Cuando bajamos a la sala, Angie rápidamente fue a donde había dejado su bolsa y de ella, sacó una caja envuelta. Era un regalo y me lo entregó

A: - Casi se me olvida.

N: - ¿Mas regalos? – respondí.

A: - Cállate y ábrelo.

Sin dudarlo, lo hice. Era un libro, pero esperen. No era un libro cualquiera. Era su reporte ya empastado.

N: - “A Man Named Marius, By Angela Halle” – leí en voz alta lo que decía la portada del libro.

A: - Oí que esa mujer estaba algo loca, pero debo admitir que logró un buen trabajo.

Y noté que en la primera página había un garabato que decía “A+”. era la calificación que había logrado.

N: - Estoy muy orgulloso de ti. Pero creo que le hace falta algo.

A: - ¿Qué? – respondió.

N: - Que la autora me firme su obra.

Ella me sonrió y sacando un bolígrafo de su bolsa, escribió en la primera pagina

 

Este es el inicio de un largo camino, y que mejor teniéndote a mi lado, tomando mi mano.

De tu mas grande fan, la coprotagonista de nuestra historia.

Angie Halle.

Y para darle un toque final, acercó el libro a sus labios y lo besó. Dejando marcado sus deliciosos labios marcados en la pagina gracias a su lipstick.

Me lo entregó

N: - Ahora estoy molesto – reclamé

A: - ¿Por qué?

N: - Por que el libro tiene marcado un beso tuyo y yo no.

A: - Creo que eres el menos indicado para decir eso. – y recorriendo mi pecho con su dedo, exclamó – tal vez no se vean, pero creo que todo esto tiene evidencia que demuestra lo contrario.

Atrapé sus labios de nuevo. Ya que ella tenía toda la razón. Mi chica, mi mujer tenía toda la razón.

A: - ¡Feliz Navidad mi niño hermoso!

N: - ¡Feliz Navidad mi ángel!

(ANGIE)

Regresamos a Manhattan. Dejamos la Land Rover porque dijo que mandaría por ella. Así que nos regresamos en la Jeep. No dejaba de tomar mi mano y besarla.

Cuando llegamos a la casa de mi padre, Bella rápidamente nos fue a recibir. Nos lleno de abrazos y besos a ambos.

B: - Santa me trajo muchas cosas. – y me jalo hacia la sala para

Pasamos un rato muy agradable con la pequeña y con su familia. Patrick y Nick estaban discutiendo de política. Eso sí que era extraño, pero me causaba gracia.

Mi padre dispuso a abrir una botella de Champagne para hacer un brindis.

P: - ¡Por Angie! Por su nuevo triunfo y por que finalmente lograra entrar del todo al mundo del periodismo.

Y alzamos las copas en mi nombre. Pero lo único que me importaba en ese instante que tenia de la mano al hombre de mi vida. Al único y verdadero amor que tengo y que tendré por el resto de mi vida.

Y pude sentir que acariciaba mi mano, exactamente en donde descansaba la prueba de su amor, nuestro pacto, mi dedo corazón, mi anillo de compromiso.

(NARRADOR)

Nick se fue a descansar a su hotel, ya que al día siguiente se reuniría con su familia y retomar la gira.

La sonrisa de Nick era inminente. Mientras se ponía el pijama y miraba su torso desnudo ante el espejo, el rubor en sus mejillas las encendía totalmente. Porque con el hecho de saber que ese cuerpo ya era de la mujer que amaba, lo hacía hervir de alegría.

Y con esos ardientes recuerdos antes de dormir, decidió hacer algo que tal vez causaría revuelo en la prensa, a pesar de ser algo muy sencillo.

Angie estaba en su habitación, ya tenia el pijama puesto despues de haber tomado una ducha y claro, recordar la preciosa navidad que había pasado a lado de su ahora “prometido”. Ni ella misma se la creía. Miraba su dedo corazón y veía su “promesa” materializada en anillo y sonreía de manera exageradamente notoria.

Decidió despejarse un poco revisando su Twitter. Sus seguidores le mandaban tweets felicitándola por lo de la portada de la revista. Ahora la lista de "followers" era de 20,000 y contando. Pero de repente, en unos de sus "replys" encontró uno que creyó que estaba soñando.

@nickjonas: "Belleza + Inteligencia + talento = @AngHalle te mereces todo el éxito y mas"

A: - ¿Acaso está loco? – decía mientras sonreía al ver que el “reply” se le estaba dando RT entre sus fans.

Después, recibió un mensaje de parte de él:

De: Nick

Para: Angie

Amor, si te llegarán a preguntar algo del tweet, tú sabrás que hacer, porque la verdad, ya no quiero estar escondiendo lo nuestro, pero no quiero afectarte. Así que tú eres la que toma la decisión de esto. Por mi, encantado de decir que tengo a la mujer más maravillosa del mundo como mi prometida.  Te Amo. Que descanse Sra. Jonas.

Al terminar de leer el mensaje, se sonrojó al pensar que ese seria "tal vez" su futuro apellido. Y más aun cuando recordó que ya era su mujer.

Tampoco ella quería esconder su relación, pero están de acuerdo que hablar de ello, los medios estarían aun más encima de ambos, y más de ella, ya que apenas se estaba dando a conocer.

Pero de lo que ambos estaban seguros, era que estaban dispuestos de estar hasta el final.

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