Memorias de un Café (13º Parte) NickNovela

El amor nace ¿escuchando? O.o

#Imagina

(ANGIE)

Al día siguiente, claro que paso por mí, y me llevo a desayunar. Hacia todo lo posible para que estuviera bien. Me hacía reír. Imaginen a Nick Jonas contando chistes bobos con tal de sacarme una sonrisa. Era genial verlo hacer muecas. Yo que siempre lo vi serio y toda la cosa. Pero ahora era totalmente diferente.

(NICK)

Ayer estuve a punto de besarla, pero gracias a Dios, no fue así. D= no me lo malinterpreten, pero para ser honestos, yo quería otro momento. Quería que fuera algo especial, romántico. Que solamente en su pensamiento y en el mío existiéramos ella y yo. No un imbécil que casi le desgracia la vida a mi pequeña hermosa.

Yo haría lo que estuviera a mi alcance para tratar de borrar esas imágenes de su mente.

Después de pasar toda la mañana juntos, me fui al #beatlab donde Greg me escucho todo lo sucedido.

G: - Viejo, creo que te estás enamorando muy rápido.

N: - ¿Y cómo no quieres que me enamore? Es la chica perfecta. Ella tiene lo que siempre he buscado. Es graciosa, honesta, trabajadora, pura… todo lo que siempre he soñado.

G: - Ya vi. Y creo que ella sentirá algo mas por ti hermano

N: - ¿Por qué lo dices?

Me dio un buen golpe en la cabeza que no pude regresarle

G: - ¡Idiota! Eres su héroe. La salvaste de las garras de algo terrible. ¿Tú crees que no va a sentir algo por ti? Por favor.

No estaba seguro. Yo tenía que oírlo de sus propios labios, pero aun no era tiempo de que yo diera algún paso. Porque:

1. Solo teníamos dos semanas de conocernos

2. Era demasiado pronto para saber si estaba enamorado de ella

Tenia que convivir más tiempo. Aunque estaba seguro de que ella era la mujer ideal.

(ANGIE)

Ensayamos durante la tarde. Y cuando solamente nos quedamos Sunny, Diane, Phil  y yo.

P: - ¿Le dirás a Nick que vaya al concierto?

DEMONIOS, HABIA OLVIDADO ESE PEQUEÑO DETALLE

A: - No lo sé. Tú sabes que me pongo muy nerviosa ante la gente. Y más me pondré nerviosa sabiendo que Nick estaría ahí.

D: - Si hermano, será mejor que no le digamos nada. Además, no creo que se acuerde. - Mire a Diane. Amé totalmente que dijera eso. Y al parecer Sunny estaba de acuerdo. – será mejor que lo invitemos cuando ya haya perdido el pánico escénico, para que no sienta que haga el ridículo.

Y con esa frase, a la hora de irme a casa, estuve más que tranquila. Solo faltaban 3 días para el concierto. Aun había tiempo. Y gracias a Diane, tendría un problema menos del que preocuparme.

(PHIL)

Cuando se fue Angie, miré a Diane y a Sunny más que enojado. ¿Cómo que no querían que Nick fuera al concierto después de lo que hiso por nuestra hermana?

Estaba a punto de reclamarle cuando de pronto:

D: - Ni empieces. Créeme, solo dije eso para que ella no sepa nada. - Sunny se rio - ¿Cuál era el chiste?  ¬¬ - es obvio que lo invitaremos. Pero no le diremos nada a Angie. Sabes perfectamente cómo se pone.

Eso lo sabía más que nadie. Aun recordaba como casi vomita el día de la audición. Cuando tocábamos entre amigos de la Universidad no se ponía asi, pero ahora que irían desconocidos, conocidos y hasta niños, no quería decepcionar a nadie. Pero yo sabía perfectamente que no lo haría. Por algo ella era la vocalista de nuestro grupo. Nos pusimos “Mustangs” por la letra de una canción que ella amaba. “No Reins” de Rascal Flatts.

Cuando mi hermana menor me dijo lo que tramaba, entendí muchas cosas.

S: - Yo que tú, le hablaba a Nick de una vez. Para que invente algo de que no estará el día del concierto y no levantemos sospechas. Angie a lo mejor nos creyó, pero ella no es ingenua y bien lo sabes.

Y no dude más. Le marque a Nick para que viniera inmediatamente a la casa. Me contesto y cuando le dije que era algo importante acerca de Angie, no dudo en venir, pero le hice prometer que no diría absolutamente nada.

(NICK)

Cuando me llamo Phil, a penas estaba terminado un “record”. Me dijo que si podría ir a su casa porque teníamos que hablar acerca de algo muy importante sobre Angie. A un principio, me asuste, pero cuando me dio un “más o menos” de lo que se trataba, me tranquilice. Así que le pedí la dirección y antes de que saliera algo importante, salí del estudio, subí a mi coche, y me fui directamente a la casa de Phil.

Al llegar, estaban Sunny, Diane y él en la cochera. Todos me saludaron. Baje del Challenger y entramos a la casa de Phil para hablar de “negocios”.

Cuando me dijeron todo y lujo de detalles, me di cuenta de que Angie tenía miedo a que yo la criticara de forma mala. Pero ¿Cómo criticarla, si no sabía cómo cantaba? Sus amigos me aseguraron que ella era increíble, pero que era extremadamente tímida.

P: - Es obvio que queremos que vayas. Solo que no lo sepa

N: - ¿Cómo que no lo…? Quiero que lo sepa – dije algo irritado

D: - Lo sabrá, después de que haya cantado. Y así no hará “el ridículo” como ella dice.

S: - Por favor Nick… no vayas a decir que iras. – Suplicó Sunny - Inventa que iras a NY por negocios. Y cuando hayamos terminado, apareces por arte de magia.

No quería mentirle. Pero al saber los motivos, no pude decir que no.

P: - Gracias hermano. Verás que hiciste lo correcto.

No podría imagina a Angie con pánico escénico. A mí me parecía tan perfecta, que no imaginaba algún defecto en ella. Entró aun mas mi curiosidad por oírla cantar, pero si tenía que estar presente pero sin estarlo, bueno, ella no sabría la verdad. Si quería que tuviera éxito, ella tenía que saber que yo no estaba presente.

Aun era temprano y estaba cerca de la casa de Angie, así que después de una charla con los chicos, subí al coche y me dirigí a su casa. Sería una visita sorpresa, además, quería saber cómo estaba. Pero antes…

Al llegar a una de las calles, me encontré a una señora que vendía flores y le pedí que me diera una docena de rosas rojas. Quería que fuera un ramo perfecto, y si, lo logró. Lo dejo tal como yo quería.

Al llegar a los departamentos, ya las luces estaban prendidas del lugar, así que estacioné el carro atrás del de Angie. Sabía que estaba, por que las luces del departamento 13 estaban prendidas. Subí las escaleras con ramo en mano, y de repente oí la voz de niños.

“Angie, cántanos una canción” – esa voz la reconocía. Era de la niña que me había dicho de las flores favoritas de Angie.

Me asomé por la ventana, las cortinas me permitan ver hacia dentro gracias a que eran medio transparentes y había contraluz. Vi a Angie con guitarra en mano, junto con los tres pequeños que me había encontrado el primer dia que vine a este lugar. Los gemelos y la niña estaban sentados en un sillón.

A: - Bueno ¿cuál quieren que les cante?

Gemelo 1: - Ya sé, cántanos la de “Gotta Find you”

A: - ¿De nuevo? Siempre que vienen se las canto – dijo dulcemente

Niña: - Es que la tocas muy bonito. De hecho la cantas mucho mejor que Joe Jonas- ¿mejor que mi hermano? Esto sí que lo tenía que ver y escuchar.

Gemelo 2: - ¡Por favor Angie! Toca esa canción, ¿sí? – y lo dijo en un tono que no ella no pudo resistir. Así que se acomodo en el sillón y comenzó con los acordes. Sus dedos se movían de acuerdo a las notas musicales que entre mis hermanos y yo habíamos compuesto. Me atrevo a decir que lo hacía mejor que nosotros.

Y comenzó:

Everytime I think I'm closer to the heart
Of what it means to know just who I am
I think I've finally found a better place to start
But no one ever seems to understand

I need to try to get to where you are
Could it be, your not that far

You're the voice I hear inside my head, the reason that I'm singing
I need to find you
I gotta find you
You're the missing piece I need, the song inside of me
I need to find you
I gotta find you

Yo estaba recargado con la cabeza en la pared escuchándola. Parecía que cantaba un ángel con su guitarra. El corazón comenzó a latir a 1000/hrs.

Los niños comenzaron a acompañarla. Ella sonreía cuando tocaba la guitarra, y por un momento pensé: ¿acaso seria así con sus hijos? ¿Con nuestros hijos? Pero después pensé que sería un gran disparate el pensar eso a poco tiempo de conocerla, pero tenía que admitir, sonaba demasiado genial si pasara. Eso me hizo sonreír. De repente, sentí como con la espalda apretó algo, y sonó un timbre… ¡oh, oh! Timbre sin querer.

(ANGIE)

Timbraron a la puerta, Lauren se levanto rápidamente y fue a abrir. Suponíamos que sería su mami que venía por ella y los gemelos. Pero no fue “mami” lo que dijo cuando abrió la puerta.

L: - Nick ¡Hola!

Los gemelos se levantaron corriendo del sillón, mientras yo más que helada, me quede plantada en mi sofá.

N: - Hola niños. – y tomo en brazos a los 3 pequeños. Entre sus bellos, torneados y bellos brazos. La verdad estaba muy sorprendida que estuviera frente a mi puerta.

Me levanté del sofá y lo fui a recibir.

A: - Hola Nick. ¿Qué haces aquí?

N: - Hola Angie… (Y comenzó a tartamudear de nuevo) lo que pasa es que salí del #beatlab y quise pasar a verte y de hecho, te traje algo.

Y salió hacia el porche, y regreso en menos de dos segundos con un bellísimo ramo de rosas rojas.

A: (sorprendida) - ¡pero qué hermosas! – me las dio. Era un arreglo perfecto. – pero ¿Cómo supiste que eran mis favoritas?

N: - ¡unos angelitos me lo dijeron!

Miró a los gemelos y a Lauren, que ellos decidieron irse para dejarnos prácticamente solos. Se despidieron de nosotros y se fueron a su casa con una sonrisa picara en el rostro.

Lo invite a pasar. Y se sentó en mi sofá, mientras fui a poner las flores en un florero. Eran tan bellas, que definitivamente guardaría una en uno de mis libros.

(NICK)

Creo que era la hora de echar a andar la mentira de que no iría al concierto.

Ella trajo las rosas ya en un florero, las puso en la mesa de centro de la sala y se sentó a mi lado y me pregunto:

A: - ¿acaso me escuchaste cantar?

N: - No, ¿Por qué lo preguntas? – era la primer mentira que le decía.

A: - no, por nada. – he intento cambiar de tema.

N: - A propósito, sé que el concierto será dentro de tres días… - y se quedó muda – pero lo malo es que no podre ir – y le cambio la cara.

A: - ¿Y por qué? – la verdad, fingió estar preocupada, pero yo sabía la pura verdad.

N: - Tendré que ir a NY a trabajar. Pero te pediré de favor que lo graben para verlo después.

A: - Te lo prometo… le pediré a Lilly que lo grabe. Y ¿cuándo regresaras?

N: - Al día siguiente del concierto. Te llamaré en cuanto llegué para que nos veamos…. – DIABLOS, HAY QUE SONAR MENOS OBVIO IMBECIL – claro que nos veamos todos los chicos y vayamos al bowling de nuevo. Y tomar revancha.

Ella soltó una risotada con sarcasmo. (Hasta el sarcasmo era adorable en su rostro). Ambos reímos y volví al tema.

N: - Será una verdadera lástima el perderme el debut de la banda, y más en un evento en beneficencia a niños que tienen la misma enfermedad que yo.

A: - Una enfermedad que tendrá cura, en lo que menos te imaginas. – y me tomo de la mano.

Nos miramos fijamente, y en silencio. Sentía las ganas desesperadas de besarla, y se los juro, estaba a punto de hacerlo. Solo era cuestión que la tomara de su cuello y aplastara mis labios en los de ella. Esos labios que anhelaba besar hasta que sangrara. Quería sentir su lengua con la mía, su aliento en mis labios, comérmela a besos desesperados, luego besos tiernos, hasta que ella me detuviera, porque si fuera por mí, la besaría de pies a cabeza…. O.o Nick, recupera la cordura, basta de pensar tan lejos – me decía la parte noble de mí, pero la parte más deseosa gritaba más fuerte.

De pronto, cuando estuve de hacer lo que más quería, tenerla ya, sonó mi celular. Aquel deseo desapareció y se volvió en molestia. Interrumpieron toda la inspiración que había tejido gracias a la parte menor noble de mí. Tanto fue mi enojo, que no sé cómo, al contestar se puso en altavoz.

“Ya deja a tu novia en paz” decía la voz que hablaba por teléfono. Era Joe empezando a molestar. Angie simplemente no dijo nada, solo se sonrojo, al igual yo, pero creo que con más intensidad que ella.

Le dije unas cuantas palabras (más bien, palabrotas) le dije que ya iba en camino y le colgué.

N: - Sera mejor que me vaya.

Me levanté del sofá y me acompaño hacia la puerta.

A: - Te vas con cuidado Nick y gracias por las flores.

N: - Ok, cuídate – le di un beso en la mejilla y me di media vuelta.

Ella puso su mano en mi rostro y me dijo al oído:

A: - Que tengas buen viaje, y que recuerdes que te estaré esperando.

¿ESPERANDO? ¿QUEEEEE? O.o

A: - Me refiero a que estaremos esperando tu regreso – Rectifico. Yo solo asentí con la cabeza y baje las escaleras hasta mi coche y me fui de ahí, casi llorando, pero de coraje, porque no me atreví a besarla y que le había mentido.

Pero de algo estaba seguro. Ese concierto, primero muerto que perdérmelo. ¡¡¡¡¡YA DIJE!!!!!!

(ANGIE)

¿Qué demonios había pasado?

Yo estaba deseosa de que me besara, que me tomará de la cintura y me diera todos los besos del mundo. Supongo que la atracción que yo creí que había, era ficticia.

Cerré la puerta deseando de que él regresara, pero sabía que no lo haría.

Lo único que me alegraba, es que Nick no me vería en el concierto. Tenía tanto miedo que si me veía, yo metiera la pata. No, no podía permitir que me viera cometiendo errores de tal magnitud. Mejor era así.

Recogí la guitarra y observe aquellas flores tan bellas que me había traído. Sabía que no era sano el ilusionarme con un obsequio, pero sus acciones habían hecho de que no existiera más hombre que él. Me había salvado, acepto gustoso el irme a recoger al trabajo, su trato, DIOS.

UN DIA ANTES DEL CONCIERTO, ENSAYO FINAL

Nick se fue ayer temprano, me mando un mensaje de que ya estaba en el avión y regresaría en la fecha que habíamos quedado. Termínanos de ensayar y todos se fueron a su casa. Sunny se fue con Tom por que había ido por ella. Diane se fue con su mamá de compras después del ensayo ya que decía que no tenía que ponerse mañana “el gran día” así que nos quedamos Phil y yo acomodando los instrumentos en su coche y en el mío.

(PHIL)

Mi hermana Angie estaba muy callada. Si, había hecho buen ensayo, como siempre, pero no estaba bien. Lo sabía. Sabía leer perfectamente a mi hermana, ella no me podía engañar. Algo pasaba, y lo iba a averiguar.

Cuando terminamos de subir los instrumentos a mi coche, decidí hablar con ella

P: - ¿Se puede saber que te sucede?

A: - Estoy nerviosa por lo de mañana, ¿Tú no? – bueno, eso me pareció convincente, pero el suspiro que hecho a continuación no era por eso.

P: - A mi no me engañas. Te pasa algo y quiero saberlo.

A: - Ya te dije que no tengo nada. Lo que tengo es un hambre esp….

P: - ¿acaso quieres que comencemos a descifrar lo que tienes? – La interrumpí, y  me abrió los ojos como platos - Y sabes que las tienes de perder.

Lo sabía. Sabía que la conocía mejor que nadie, y ella también me conocía como la palma de su mano.

Se sentó en la facia del coche

A: - Ayer fue Nick a mi casa, y me llevó un ramo de rosas rojas. Me sentí fenomenal al ver ese bello detalle de su parte. Pero cuando se fue, sentí que… no lo sé hermano. Siento una extraña sensación cuando estoy con él.

P: - Que bien hermana, eso significa que es algo bueno

Y ella explotó

A: - ¡¿CÓMO QUE ALGO BUENO?!NO PUEDE SER ALGO BUENO, ÉL TIENE UN MUNDO DONDE YO NO PUEDO ENCAJAR. ÉL TIENE MUCHAS COSAS QUE YO NO PUEDO DARLE.

Ahora si me había hecho enojar

P: - ¿CÓMO? TIENES MUCHO AMOR QUE DARLE

A: - ¿AMOR? ¿CÓMO QUE ES AMOR? – y comenzó a reírse la manera irónica y sarcástica que odiaba.

P: - NO TE HAGAS ANGIE, LO LEO EN TUS OJOS ¡ESTAS ENAMORADA DE NICK!

A: - POR SUPUESTO QUE NO. – lo negó rotundamente

P: - ¡POR FAVOR ANGIE! TE CONOZCO BIEN. VEO COMO LO MIRAS, COMO SONRIES, COMO ACTUAS. CAMBIAS. NO ROTUNDAMENTE, PERO LO HACES.

Ella quedó en shock al oír esas palabras de mí. Sabía que yo tenía toda la  razón, había dado justo en el blanco.

A: ¿Y DE QUE SIRVE QUE YO LO ESTE, SI ÉL NO SIENTE LO MISMO? – finalmente lo escupió – Y MAS TE VALE QUE NO DIGAS NADA O TE LAS VERÀS CONMIGO.

Se volvió a sentar, pero ahora se llevó la mano al rostro. Esta era una de las pocas veces que la veía llorar. Siempre, ella tan fuerte, a lo que sabía, ella no lloraba más que en su cuarto. Y yo era el único que la había visto, pero se me hizo extraño que lo hiciera, porque de verdad, eran pocas veces que la había visto llorar.

Me senté a su lado y le pasé el brazo por los hombros. Ella siguió llorando en mí.

P: - Te prometo que no diré nada hermana. Pero no digas que eres poca cosa para él. Eres mucho más que nada en este mundo.

Yo sabía que este sentimiento era más que correspondido por Nick, aunque él no me lo había dicho. Claro, somos hombres y sabemos cuando pasa esto.  Pero a pesar de que era el mejor amigo de Angie, sabía que  a mí no me correspondía decírselo. Sabía que Nick algún día se lo diría, y a pesar que odiaba ver a mi hermana así, yo no mencionaría nada de esto, aun. Pero era obvio que si Nick le hacía más daño, yo mismo le pondría la golpiza de su vida. Aunque dentro de mi sabia que esa posibilidad era muy remota.

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